lunes, 30 de noviembre de 2009







¿La Fiesta en Paz?
Otro cartel de la manga


Leonardo Páez


En la llamada autorregulación, que tan desastrosos resultados ha tenido para la sociedad, pero tan pingües rendimientos deja a los autorregulados, el libreempresismo hace cuanto le viene en gana y la autoridad hace como que aplica la ley, para que al final los únicos perjudicados sean el espectáculo dizque sobrerregulado” y el público, ambos con una indiferencia que asombraría a un budista.

Y la expresión “sacarse de la manga” significa decir o hacer algo sin tener fundamento para ello, así se disfrace de profesionalismo, de favorecer el bien común o de… improvisar un mano a mano entre una figura del toreo mundial (José Tomás) y una casi figura del toreo nacional (Arturo Macías), pero sin antecedentes de rivalidad recíproca que justifiquen el encuentro.

Mano a mano es el festejo, corrida o novillada, en que únicamente alternan dos diestros para lidiar las reses anunciadas. Cuando en México hubo criterios empresariales y ganaderos más sensibles en materia taurina, los manos a mano constituyeron intensas confrontaciones no sólo de actuantes, sino de partidarismos, apasionamientos y auténticas catarsis colectivas que incluso atenuaban la presión social de nuestra perenne desigualdad.

Carece de relevancia que por fin una figura española se haya gastado aquí unos pesos en publicidad, de escasa imaginación por cierto, en anuncios exteriores y en inserciones por radio y televisión, ni que su ocasional alternante sólo sea conocido en el medio taurino mexicano y algo en Sudamérica. Importan hechos más significativos.

Afortunadamente ambos toreros, no obstante las diferencias curriculares de edad (34 y 26), años de alternativa (14 aunque cinco retirado y cuatro), triunfos en escenarios internacionales, así como técnica y oficio a partir del tipo de ganado que lidian –de honorarios ni hablar–, poseen valiosos rasgos comunes: intensa expresión personal, elevada autoestima, insuperable competitividad y valor espartano –los dos están cosidos a cornadas–, es decir, sello y celo de sobra para darle sentido y atractivo a este encuentro sin un historial compartido en los ruedos.
A la sobriedad casi monástica de Tomás, el estilo alegre y desenfadado de Macías; a la sólida técnica de José, la improvisación lúdica de Arturo; al semblante ensimismado del madrileño, la sonrisa carismática del aguascalentense. Y en ambos, la quietud sin poses y ese amor propio casi patológico de no dejarse ganar la pelea por nadie.

Esos serán los ingredientes esenciales la tarde de hoy, embistan mucho o poco los toros de Xajay, luego de que empresas y apoderados se olvidaron fomentar en el público las siempre redituables competencias apasionantes entre personalidades toreras contrastadas.

Remate obligado: exigir reciprocidad taurina con España cuando en México no la hemos sabido tener con nuestros toreros jóvenes, sólo descubre a los falsos nacionalistas y pinta de cuerpo entero un concepto del espectáculo y una actitud de sus gremios tan negligente como acomplejada.

Ah, y cuidado con videograbar las faenas de José Tomás porque los infractores serán enviados a las Islas Marías. Por lo pronto el torero prohibió a Televisa transmitir la corrida. ¡Eso es mandar!, legisladores chafas.


Toros
El juez Cardona acertó al negarle una oreja al de Madrid y un rabo al mexicano


Arturo Macías enloquece a la Plaza México; José Tomás fracasó con los mansos de Xajay
Con una faena casi perfecta, el de Aguascalientes bañó al más grande torero de nuestro tiempo



Lumbrera Chico
Periódico La Jornada
Lunes 30 de noviembre de 2009, p. a38
Otra manera de explicarlo no hay: Arturo Macías enloqueció a 35 mil espectadores que ayer atiborraron la Plaza México... para ver a José Tomás. El mayor torero del planeta, dueño de una posición tan alta en el escalafón mundial que debajo de él no hay nadie, y después de nadie Sebastián Castella, y después de Castella el resto de la humanidad, fue bañado durante la lidia, casi perfecta, del segundo de la tarde, que marcó la consagración del joven maestro de Aguascalientes.

Muy bien presentado y con 450 kilos de peso, el bicho de nombre Cuatro Caminos se arrancó de largo al salir de toriles y arrolló a Macías cuando éste intentaba pegarle una chicuelina. La paliza que el artista recibió en la arena, hizo que se helara el gentío cuando los monosabios lo recogieron exánime. El mano a mano había terminado antes de empezar. Pero entonces Macías resucitó.

Se echó el capote a la espalda, se plantó en los medios, volvió a citar de largo, aguantó la embestida como una estatua y dibujó tres gaoneras impecables, con los pies fijos en el mismo sitio, antes de rematar con un adorno a una mano que puso a la multitud en éxtasis.

Para iniciar su trasteo de muleta regresó a los medios y convocó a la fiera, oscilando la franela como un péndulo. Cuando el bruto acudió a él, se lo pasó por la espalda, y luego por delante, y luego por la espalda otra vez, sin mover las zapatillas ni un milímetro, antes de coger el paño con la zurda y templar en redondo con una lentitud, una profundidad y una belleza irrepetibles.

El animalito era bravo pero débil y necesitaba reposo. Macías se alejó para dárselo y planear la siguiente estrofa de su poema. Esta se tradujo en una serie de derechazos en que el trapo y los cuernos viajaron en torno de él a la mínima distancia, pero sin tocarse jamás, en un derroche prodigioso de temple, mando y sitio. Luego ocurrió lo mismo, pero por la izquierda, y la gente no cesaba de aullar ¡ooole! y ¡ooole!, ni de proclamarlo “¡torero, torero, torero!” en cada pausa, cuando de repente, como un foco, el toro se apagó.
Macías fue por la espada, con los ojos llenos de lágrimas, conmovido por el delirio que había desatado. Sabía, por supuesto, que su primera obra maestra necesitaba llegar al clímax. Y lo consiguió citando de frente, con una pasmosa serie de manoletinas invertidas, con dedicatoria especial a José Tomás. Acto seguido, se perfiló para la suerte suprema, echó la muleta a los belfos de la res y consumó el milagro de matar recibiendo, pero sin partirle a la bestia el corazón, por lo que el espadazo no fue fulminante.

De todos modos, cuando el toro dobló un larguísimo minuto después, la gente saltó eufórica a exigir las orejas y el rabo, mientras Macías lloraba ya sin pudor ante el aleteo de miles y miles de pañuelos. Pese a las protestas, el juez Miguel Ángel Cardona hizo bien al conceder sólo dos orejas (por los defectos del estoconazo), pero se equivocó al negarle al noble de Xajay el arrastre lento.

Con sus otros dos enemigos, Macías cometió graves errores. Uno, al brindarle la muerte del segundo a un desprestigiado locutor de televisión, que oyó sonoros abucheos, y otro al citar de rodillas al tercero y último de su lote, lo que indignó al público por la falta de respeto hacia el toro y la pérdida de majestad que el desplante suponía, y cuando se llevó una nueva paliza por esta causa la gente perdió interés en él.

A José Tomás todo, por su parte, le salió mal. Le tocaron en suerte los toros más mansos. Se vistió con el terno (amarillo azafrán) más feo que posee. Y jamás conectó con la multitud. No fue su tarde. Era como si no hubiera ido a la corrida, como si no hubiese estado allí...


Toros
¿La fiesta en Paz?
Tradicional dependencia


Leonardo Páez
La riqueza arquitectónica del centro histórico de Quito, capital de Ecuador, es inversamente proporcional a su conocimiento y apreciación por el resto de los países latinoamericanos. Divide y debilitarás ha sido la consigna del colonialismo anglosajón en el nuevo” continente.

Agréguese el sometimiento de sus respectivas elites al extranjero y la escasa imaginación de nuestros países para cacarear e intercambiar valores y expresiones que fortalezcan la unidad a partir de la rica diversidad, y se entenderá mejor la creciente dependencia de la región a casi 200 años de “independencia”.

En materia de toros las cosas no podían ser diferentes, y si durante el siglo pasado México logró consolidar su tradición tauromáquica y ganadera de bravo, los demás países latinoamericanos cancelaron esa tradición o la redujeron a enclave colonial taurino de España.

Tal es el caso de Perú, Venezuela, Colombia y Ecuador, con un potencial sistemáticamente obstaculizado por sus propias elites, satisfechas de proporcionar en sus ferias anuales dinero, plazas, público, ganado, subalternos y algún matador local, a cambio de la legión de figuras españolas que con profesionalismo emocionan a esos dependientes públicos… hasta el año siguiente, en tanto los toreros de cada país, sin una dinámica taurina que los apoye, ven pasar el tiempo.
En el blog desde el albero… (http://elalbero.blogspot.com/) un estudio sobre la fiesta en Quito revela: “Los espectáculos taurinos son la forma de vida de miles de familias que participan de ellos de manera directa e indirecta… La actividad taurina en la capital genera un movimiento económico de alrededor de 50 millones de dólares… En total 27 mil 286 personas trabajan en más de 3 mil establecimientos relacionados con la industria turística de la provincia de Pichincha...”

“Además de la recaudación de IVA e ICE del SRI, el cabildo recibe, solamente a través del impuesto a los espectáculos públicos, unos 500 mil dólares que le sirven para financiar el resto de actividades que se realizan en esta época… Entre el primero y 6 de diciembre de 2008 llegaron a Quito 19 mil 624 turistas, se sostuvieron 58 mil 878 empleos directos y 98 mil 120 indirectos. La actividad turística mueve entre 12 y 14 millones de dólares durante las fiestas de Quito, donde 210 mil microempresarios reportan un crecimiento de sus actividades y ventas de entre el 30 por ciento y el 60 por ciento”. Y sí, a falta de una fiesta de toros propia, algo les queda.


Toros
Se consagró El Cejas

José Cueli
José Tomás regresó a la México y apareció la cercanía con la muerte, lo misterioso, lo inesperado, lo que se quiere y nunca se tendrá. Todo lo opuesto a lo robotizado, lo mecánico, lo repetitivo. Llegó al ruedo de Insurgentes la atracción por el peligro. Y bien que aprovechó la llegada del maestro madrileño Arturo Macías El Cejas, que con el único toro de los enviados de la ganadería de Xajay que tenía emoción y encastada nobleza, enloqueció a los aficionados. Primero con una revolcada angustiosa, luego con un quite por gaoneras que nos paralizó. Brindó a la concurrencia y la faena consagratoria. Pases de todas las marcas a milímetros de los pitones, que finalizó con una serie de adornos y medios pases de filigrana en los que se percibía la alegría de su natal Aguascalientes, previo a la estocada en lo alto.

El único que no se enteró de lo acontecido fue el juez de plaza, que le negó el rabo que pedían los 35 mil aficionados que llenaron el el coso. No era un rabo cualquiera, era un rabo frente a José Tomás de sinodal y tarde de expectación. Ese mismo juez le había negado una oreja a José Tomás en el toro anterior. Que al igual que el resto de la corrida de Xajay fue mansa, descastada, rajada, y con tendencia a regresar a la querencia.
Con este material el diestro de Galapagar nos mostró que es otro del que conocimos en años anteriores. Un auténtico maestro de tauromaquia que se agrega a su capacidad de hacer sentir el toreo. Por la misma razón, sin la transmisión de los bureles se le vio frío. Más, dueño de un sitio envidiable, conocedor de los terrenos y las distancias en los que ejecuta el toreo. En su necesidad de complacer a la afición, regaló un toro (que no puede ser, porque lo que no puede ser es imposible).

El madrileño vive y torea al margen. Vestido principescamente de champaña y oro, sus ademanes eran lentos, solemnes, chorreando majestad y torería. Extendía la capa en los remates de los lances y se envolvía en un rito. Ya no es el torero temerario que se la pasaba en los lobos de los toros. Conoce los secretos de la lidia y necesita del toro negro, renegrido símbolo de lo demoniaco que busca y burla la muerte y por dentro lo va matando. Así, sin apoteosis, salió triunfador El Cejas, que con rabo o sin él se consagró como figura.




Lunes, 30 de noviembre de 2009 La Jornada de Oriente - Puebla -

TAUROMAQUIA
El Toreo de Puebla
Alcalino

Ayer domingo se cumplieron 73 años de la inauguración de El Toreo de Puebla. Su diseño mejoraba con creces el de El Toreo de la colonia Condesa en el DF, aunque con un aforo menor: 14 mil personas para una Puebla con no más de 150 mil habitantes. Como el principal coso del país, contaba también con palcos de contrabarrera (48), enfermería perfectamente acondicionada, amplia capilla y una buena casa habitación para el conserje. Sus amplias corraletas podían alojar hasta cuatro corridas de toros, y el lujoso diseño de sus instalaciones le daban un aire mucho más moderno que el de su homónimo capitalino. Si andando el tiempo alguien sugirió que teníamos “la plaza más grande del mundo” porque nunca se llenaba, la explicación hay que buscarla en un largo período de abandono, resultado de administraciones caóticas o de plano inexistentes. Matizando: El Toreo de Puebla vivió inicialmente una etapa de esplendor, que duraría unos 15 años, y después vino su decadencia, cuando a la empresa de la capital le dio por incluir en sus contratos una cláusula que prohibía a los diestros actuar a menos de 200 kilómetros del DF. Corría 1952 y, a partir de entonces, en Puebla empezaron a escasear los festejos. Y cuando en el otoño de 1960, Guillermo Carbajal –inquieto matador metido a promotor– organizó con enorme éxito de público una temporada alternando corridas y novilladas durante diez domingos consecutivos, Alfonso Gaona, empresario de la México, se apresuró a incorporar nuestro Toreo a la nómina de plazas que administraba... para mantenerlo cerrado a cal y canto. Fue la puntilla para un espléndido escenario, que ya nunca más se recuperaría.

Añejos esplendores. El estreno no pudo ser más promisorio. Cerrado el coso de la Condesa por el asesinato del empresario Margeli, ausentes los toreros hispanos tras el boicot contra los nuestros que marcó ese verano, y sin comprador a la vista las mejores corridas que pastaban en el campo bravo nacional, lo mejor de la afición capitalina se volcó sobre Puebla, que anunciaba una temporada al máximo nivel, basada en la mejor generación de figuras que ha dado este país. Así, con llenos absolutos, se dieron las dos primeras corridas de la serie inaugural. Luego, el bisoño público local –una constante durante el siglo XX fueron en Puebla las largas etapas sin toros, como la que precediera a la construcción de El Toreo– fue incapaz de sostener por sí mismo una temporada tan cara y lujosa. Por lo que, a partir del año nuevo del 37, los festejos empezaron a espaciarse. Pero lo que había ocurrido en el flamante coso, por su calidad, tono y jerarquía, bien merece rememorarse.

Efemérides. El 29 de noviembre de 1936 partían plaza para inaugurar El Toreo de Puebla Alberto Balderas (solferino y oro) y Jesús Solórzano (verde botella y oro). Les aguardaba una corrida muy fina de San Mateo. Gran expectación cuando apareció “Cautivo”, con el que Balderas estuvo bien sin pasar a mayores. Solórzano, en cambio, acopló su temple al de “Encochijo” y le cortó las orejas, erigiéndose en el primer triunfador en la historia de nuestra plaza. Los sanmateínos, primeros seis de los 13 que habían llegado por tren desde Zacatecas, y fueron conducidos la madrugada del martes 24 por las desiertas calles que separaban la estación de ferrocarril del nuevo coso, resultaron faltos de pujanza. Tampoco la tuvo el encierro de La Laguna –tan bien presentado como soso– que despacharon en el segundo festejo (06.12.36) Armillita y El Soldado. A éste, don Carlos Reyes, gerente administrativo de la empresa, lo había localizado en París tras el boicot antimexicano y el estallido de la guerra civil española, y lo contrató por cable. Pero ambos espadas tendrían oportunidad de desquitarse al domingo siguiente, cuando Fermín otorgó la alternativa a Arturo Álvarez y le cortó el rabo al cuarto de Zotoluca, que lidió esa tarde la corrida más brava de la corta serie inaugural; Luís Castro, por su parte, triunfó clamorosamente con el 5º y repetiría color en la corrida siguiente, 2ª de San Mateo, que resultó ideal y les permitió salir en hombros a él y a Balderas. Lamentablemente, a estos dos festejos, los mejores del cuarteto inaugural, ya no asistió el aluvión de aficionados capitalinos, pues la temporada en el DF se había puesto en marcha. Sería la llamada de la independencia taurina de México, pues basada en el concurso de solamente cinco matadores –pero qué matadores: Armilla, Balderas, Solórzano, Garza y El Soldado– iba a representar el punto de inflexión hacia la indiscutible Época de Oro de nuestra tauromaquia.

Para la historia. Entre los muchos sucesos que El Toreo de Puebla presenció sobresale la alternativa del gran Silverio Pérez con “Estudiante” de La Punta y de manos de Armillita (06.11.38), la presentación de Manolete alternando precisamente con Fermín y Silverio en lo que se denominó el cartel más caro del mundo (02.02.46), la falsa despedida de Lorenzo Garza (28.11.43), inmenso con “Campanero” de Piedras Negras en uno de sus últimos manos a mano con El Soldado, o el que el mismo Garza sostuvo con el Monstruo de Córdoba (26.01.47), fresco aún el célebre mitin que había dado en la México el domingo anterior: ambos desorejaron una corrida de Xajay fuerte y encastada.

Por El Toreo desfilaron los mejores figuras españolas, de Cagancho y Domingo Ortega a El Cordobés, y por supuesto todos los mexicanos de pro, dejando el recuerdo de grandes tardes y faenas Armilla, Garza, Silverio, Arruza, Procuna, Briones, Fermín Rivera, Calesero, Gregorio García, Rafael Rodríguez, Córdoba, El Ranchero, Capetillo y Alfredo Leal. Pero terminaría siendo la de José Huerta –León de Tetela– la presencia más constante y triunfal, aunque no tanto por su fallida encerrona de despedida en el Año Nuevo de 1973, último de sus 13 paseíllos en nuestra plaza. Nadie lo sospechaba, pero ya la picota se aprestaba a convertir en polvo y cascajo al añorado coso de la 9 Poniente.

Postrimerías. El último festejo se dio el 5 de mayo de aquel año 73, bajo un ambiente enrarecido por los sucesos del día 1, cuando la Policía Estatal atacó a mansalva la UAP, dejando un triste reguero de sangre joven. Esa tarde, Manolo Martínez obtuvo con el 1er. reyeshuerta uno más de sus invariables éxitos en un coso al que, sin saberlo, estábamos despidiendo, y fue Mariano Ramos quien cortó, del 3º, la última oreja. Alternaban con el gaditano Ruiz Miguel. Hubo aún, a fines de septiembre, un festival benéfico, capítulo final de una historia definitivamente rota cuando, en abril de 1974, la nueva propiedad del coso, una cadena de supermercados, inició, sin previo aviso, la rápida demolición de El Toreo.




30-Noviembre-2009
Macías, orejas; Tomás, una
Alfonso López
Cardona le robó otra al madrileño y no vio dos que eran de arrastre lentoEl olé previo al paseíllo, de los 35 mil presentes ayer en la México, debió escucharse en Galapagar y en Aguas, como también muchos otros del cuarto festejo de la Grande 09-10, en el que el inepto dizque juez Cardona le robó la oreja de su primero a José Tomás, y menos mal que aceptó concederle la de su segundo y, a Arturo Macías, podía haberle dado el rabo, pero todo quedó en dos orejas y una pila de mentadas merecidas.

Por si fuera poco, como no sabe ver cualidades de un toro ni cuando lo van arrastrando, no captó que primero y segundo de los siete de Xajay eran de arrastre lento.

Otro triunfador fue Armando Ramírez, por dos muy buenos pares al sexto.

Se jugaron, bien presentados y casi todos bravos al caballo, estos criados por Javier Sordo y familia… Tú y las Nubes, fijo, claro, con recorrido y ovacionado en el arrastre y, en ése, José Tomás, no mucho al recibirlo, cerca el quite, inicio de faena caminándole y qué tandas de pases bellos y exponiendo antes de la estocada en perfecto sitio y certero descabello… Cuatro Caminos, fijo, noble, muy claro y también ovacionado al llevárselo y, con ése, Macías, un volteretón, puso de pie a muchos al quitar y, estoico, dos veces en la faena, luego brotó el “¡Torero!” y lo mató recibiendo… Los demás, todos pitados al final, fueron Palomo Querido, noble, pero soso y, ante ése, el de Galapagar, lances suaves, se la jugó en el quite y se ajustó y estuvo variado en la faena y los paró del asiento al final en tablas, antes de una entera.

Siete Mares, sin humillar y suelto y, en ése, el de Aguas, tersura con la capa y poco podía lograrse con el deslucido al que fulminó… Que te Vaya Bonito, deslucidote y, con ése, José Tomás, aceptables de recibo, se la jugó al quitar y mucho hizo con pegarle pases antes de la entera y un descabello… Pa’Todo el Año, corto, sin humillar y manseando y, ante ése, Macías, lances cada vez mejores, un quitazo, dejó hacer uno a Christian Ortega, no malo y, al iniciar hincado la faena, otra paliza, después no había nada que hacer y hasta descabelló… Yel de regalo, por cierto, no reseñado y eso es indebido, Babel, cada vez más corto y, en ése, el madrileño, lo bueno, la puesta en suerte y el quite, le sacó pases que no tenía y hubo un aviso luego de un pinchazo plausible y suficiente.

El 6, Miguel (retorna), Cayetano (confirmación), el Payo (testigo) y de Arroyo Zarco.



Macías se fue por delante

El torero mexicano cumplió valiente en el mano a mano con José Tomás y se cortó dos apéndices por sólo uno del de Galapagar

El esperado y muy publicitado mano a mano por parte de José Tomás se lo llevó Arturo Macías "El Cejas".

Desde la queretana exhacienda La Laja, Xavier Sordo envió siete ejemplares con digna presencia, nobles y faltos de raza. Solo destacó el segundo, al que el juez Rafael Cardona le faltó premiarlo con arrastre lento. También fue censurado por su mesura en otorgar orejas por lo que la gente se metió con él por negarle una oreja a Tomás en su primero y el rabo a Macías.

El madrileño Tomás transmitió a los tendidos en todo momento. Abrió plaza para torear ajustadamente aunque de muleta no todos los pases destacaron por ser limpios. Le enganchan en demasía la muleta. Mató de entera contraria algo tendida y una fue concedida la oreja que pedían sus partidarios. Terminó por dar una vuelta al ruedo entre clamores.

En su segundo se mostró aseado para torear con mucho temple y quietud de pies y ahora sí, pasear una oreja bien cortada. En el quinto se mostró bien de capa. De muleta se le vio quieto de pies, valiente y dominador. Mató de tres cuartos de estoque para escuchar ovación. Regaló uno más de la misma ganadería para pegar un escalofriante quite por tafalleras y de muleta torear erguido comunicando con la galería en sus estatuarios de cierre de faena. Escuchó un aviso y se retiró entre ovaciones.

Pero el hidrocálido Arturo Macías acabó por apretar a Tomás y ganarle la pelea, a pesar de estar menos toreado y publicitado. En su primero recibió de capa y fue aparatosamente levantado. Se pensó que Tomás se quedaría con el resto de la corrida, sin embargo, no fue así. Se repuso Macías para pegar un escalofriante quite por gaoneras que puso a la plaza de pie. Pegó muletazos suaves y templados al mejor toro de la corrida; sin embargo la faena no fue a más.

Mató de entera recibiendo para cortar dos orejas con petición de rabo. En su segundo estuvo bien de capa aunque de muleta mostró pocos recursos técnicos. En el sexto de capa se mostró quieto con los pies fijos. Inexplicablemente le dio por empezar la de muleta arrodillado, y al segundo pase fue aparatosamente cogido sin consecuencias.

Terminó como pudo para escuchar ovación y salir a hombros al término de la corrida. Sin duda luce más con un toro que le va, más que buscarle las faenas.

FICHA
Cuarta corrida de la Temporada
Plaza México
Tres cuartos de plaza, la mejor entrada de la temporada.
Siete de Xajay nobles y descastados. Destacó el segundo que fue noble e iba de largo. Mereció arrastre lento.
José Tomás. Petición negada con ovación. Oreja. Ovación. Aviso y ovación.
Arturo Macías. 2 orejas con petición de rabo. Silencio. Ovación.

Octavio X. Lagunes Ciudad de México




"El Cejas" salió a hombros
Arturo Macías fue víctima del juez de plaza, que le negó el rabo de su astado.


La Prensa
30 de noviembre de 2009
Javier Trejo

Arturo Macías "El Cejas" fue el triunfador de la tarde, luego de haber cortado las dos orejas al primero de su lote y pudo haber sido más, pero el juez de plaza Miguel Angel Cardona no le concedió el rabo que el público exigía le otorgara después de la gran faena que había logrado para beneplácito de los aficionados a la fiesta brava y que en gran número acudieron y presenciar la cuarta corrida de la Temporada Grande 2009-2010 de la Monumental Plaza México.

José Tomás también fue víctima del juez de plaza, al negarle los trofeos con el que abrió plaza, por su parte, estuvo como siempre en valiente y torero para llevarse una oreja, que cortó al segundo de su lote. Regaló un astado, pero no logró hacer gran cosa. Aún así el público lo despidió con tremenda ovación.

En una tarde muy agradable y torera en la que no hubo frío, ni viento se lidió un encierro de la ganadería de Xajay y hay que manifestar que cuando menos los dos primeros merecieron el arrastre lento y los demás ya no estuvieron a la altura.

Al término del paseíllo, los integrantes de la Porra de Las Alturas: Pablo Huerta y su hijo Pablito acompañados por Alfonso Pedroza entregaron una herradura floral, al aguascalentense Arturo Macías como triunfador de la temporada pasada y le desearon la mejor de las suertes para este nuevo serial.

EL CEJAS

Arturo Macías "El Cejas" con "Cuatro Caminos", herrado con el número 204 y peso de 480 kilos, en su labor con el capote fue empitado espectacularmente, sin consecuencia alguna y regresó para lucir en lances y quites por gaoneras, bien firme en los medios del ruedo. Con la muleta inició con el péndulo y derechazos muy torero y valiente, para ligarse con una tanda de naturales después de un derechazo y el cambio de mano. Al natural lo aguantó bien y estuvo mejor con el de trinchera y la dosantina. Ejecutó una tanda de manoletinas y pasaportó recibiendo al astado. Los tendidos se tiñeron de blanco para las dos orejas y el juez de plaza le negó el rabo que el público exigía para el matador de Aguascalientes. Con su segundo "Siete Mares", herrado con el número 141 y peso de 491 kilos, inició bien con el capote, mientras que con la muleta no le encontró el modo a un toro distraído, por lo que los aficionados le exigieron algo más, pero no logró hacer gran cosa. Mató de una entera desprendida para irse en silencio y pitos al toro. Con el sexto de la tarde "P'a Todo el Año", con el número 194 y peso de 493 kilos, lució con sus lances y quites. Dio paso al sobresaliente Cristian Ortega, quien de igual forma fue ovacionado por sus quites. Además el banderillero Armando Ramírez "Bam Bam", saludó al tercio por su labor en banderillas. El Cejas con la muleta inició de rodillas, cosa que nunca debió hacer, y fue revolcado sin consecuencia, se negó a ir a la enfermería, pero la faena ya no fue lo que se esperaba. Pinchó y mató al primer descabello. Pitos al toro en el arrastre.

JOSE TOMAS

"El Príncipe de Galapagar" abrió plaza con "Tú y las Nubes", con el número 165 y peso de 502 kilos, de inmediato prendió al público con sus lances y quites. Con la muleta bordó el toreo con tandas al natural metido en los terrenos del burel, prácticamente fue una faena por el lado izquierdo y lo aguantó bien cuando lo toreó por la derecha en un palmo de terreno, que los aficionados disfrutaban al máximo. Necesitó del descabello para matar al toro después de haber dejado una entera. Petición de oreja que el juez de plaza no concedió ante el disgusto del respetable y todo quedó en vuelta al ruedo. Con su segundo "Palomo Querido", número 171 y peso de 485 kilos, después de sus lances y quites brindó al público en general. Con la muleta inició la faena con una tanda de estatuarios en los medios de la plaza, para torear por pitón derecho y en redondo a un toro de poca transmisión. Aún así utilizó al máximo su experiencia para meter al burel en el engaño y poner de manifiesto su vergüenza torera. Pasaportó de una entera para llevarse una oreja. Con el quinto de la tarde "Que te Vaya Bonito", número 126 y peso de 505 kilos, fue tremendamente ovacionado por esos quites por gaoneras bien ceñidos que incluso era atropellado por el astado. Con la muleta no pudo hacer gran cosa ante un toro suelto y distraído, pero buscaba la manera de hacer la faena. Mató de tres cuartos de estocada. Pitos al toro. Con el de regalo de nombre "Babel" y de la misma ganadería de Xajay, estuvo muy valiente buscando las embestidas cerca de los pitones, pero lamentablemente no logró nada interesante. Pinchó y escuchó un aviso. Pitos al toro en el arrastre.

Finalmente el público lo despidió con tremenda ovación y El Cejas salió a hombros.

CONFIRMACION

La próxima semana en la quinta corrida, Miguel Espinoza "Armillita" confirmará la alternativa del matador español Cayetano Rivera y de testigo Octavio García "El Payo" con astados de Arroyo Zarco.



Una enriquecedora alianza: Quién.com y MTM
Lunes, 30 de Noviembre del 2009 México, D.F.
Por: Redacción
Mundotoro México se complace en ofrecerles la galería de imágenes del portal Quién.com, gracias al acuerdo alcanzado en días pasados con Luis Bueno, su jefe de información, que permitirá a los usuarios de nuestro portal tener acceso directo a las fotos de este prestigiado medio de comunicación.

Y comenzamos con la corrida de ayer en la Plaza México, donde se dieron cita muchas personalidades de distintos ámbitos.

Esperamos que esta enriquecedora alianza permita acercar a la fiesta de los toros a un sector relevante de la sociedad, a través de Quién.com, y a su misma vez contribuya a difundir el espectáculo entre los miles de usuarios de este portal, donde aparecerán textos puntuales de Mundotoro México.

http://www.quien.com/circulos_mexico/2009/11/29/corrida-de-toros


Faena cumbre de Macías en La México (video)
Domingo, 29 de Noviembre del 2009 México, D.F.
Por: Juan Antonio de Labra / Foto: Sergio Hidalgo

En el gran coso había unos 35 mil espectadores dispuestos a emocionarse con dos tauromaquias distintas; con dos personalidades antagónicas; con dos maneras de sentir e interpretar el toreo, y quizá con el denominador común del amor tan grande de uno por su tierra de nacimiento, y el otro de su tierra por adopción: Aguascalientes.

Había quienes todavía le escatimaban a Arturo su presencia en el cartel. Sin embargo, su paso por este coso en los últimos años le avalaba plenamente para torear con ese monstruo del toreo como es José Tomás.

Y es que desde su reaparición, el de Galapagar sólo ha toreado mano a mano con El Juli (en la plaza de Ávila), y con Morante de la Puebla (en el Puerto de Santa María), dos rivales de muy distintas condición y experiencia con respecto de Arturo.

Así las cosas, el reto no era fácil para el hidrocálido, que salió dispuesto a todo y, nada más ponerse delante del su primer toro, fue volteado feamente cuando toreaba con el capote. Los segundos de angustia presagiaron una inesperada encerrona, y hasta el propio José Tomás se metió al burladero de matadores con un gesto de preocupación en el rostro.

Pero Arturo está hecho de una pasta especial, y se sacudió la ropa para volver al toro al que, después de picado, cuajó un sensacional quite por gaoneras, uno de los momentos estelares de la corrida.

El público aulló en el tendido con aquel artístico y valiente arrebato, y ya no abandonó ese estado de comunión con Arturo, que cuajó una de las faenas más estructuradas y bellas de todas cuantas ha realizado en La México.

Porque no sólo fue temple mágico en su muleta, que enamoró de principio a fin al nobilísimo toro de Xajay, sino una inspiración talentosa que mantuvo en un hilo el entusiasmo de la gente, que disfrutó a tope la suavidad de cada muletazo, el asentamiento de las zapatillas, la serenidad del torero.

Así se pasó una y otra vez las embestidas por la faja: ceñido y torero, en series de magnífico acabado que abrochó con señeros pases de pecho o sedosos cambios de mano. Y hasta un fulgurante muletazo cambiado por la espalda brilló como un astro en medio de la algarabía colectiva.

Las bernardinas finales fueron la cereza en el pastel. Se perfiló Arturo para matar en le suerte contraria, y citó a "Cuatro Caminos" de largo; el de Xajay tomó la muleta con la misma clase, humillado y con ritmo, y el torero ejecutó la suerte a un tiempo, en una demostración de valor.

Aquella maravillosa rúbrica merecía los máximos trofeos. Sin embargo, el juez Miguel Ángel Cardona, que reaparecía en el palco de la autoridad tras varios meses de ausencia, no tuvo la sensibilidad para conceder el rabo del toro.

¿Qué es entonces lo que un torero tiene que hacer para cortar un rabo en La México? Así como le recriminaron a Arturo el rabo que le concedieron el pasado 8 de febrero, después de otra faena casi del mismo nivel, con un gran toro de San José, ahora se lo pidieron con verdadera pasión.

Y el enojo de la gente fue mayúsculo. No era para menos. La seriedad de la plaza es una cosa, y la sensibilidad para captar la valía de una faena como ésta es otra.

Arturo trató de disimular su enfado, y dio la vuelta al ruedo con las dos orejas del toro en las manos; un ejemplar que debió ser premiado con arrastre lento.

La gente, que nunca se equivoca, entregó todo su entusiasmo al torero de Aguascalientes y, por otra parte, recriminó la rácana actitud del juez de plaza, que ya había cometido el error de no entregarle la primera oreja de la tarde a José Tomás, después de una faena importante.

Porque vaya que también el de Galapagar había toreado al toro que abrió la función con entrega, en un trasteo macizo y muy torero, donde desgranó detalles de una calidad.

A partir de la lidia del tercer toro, la corrida tuvo un bajón de ánimo, quizá porque los toros de Xajay no estaban aportando emoción a las faenas.

José Tomás se esmeró delante del tercero al que fue sobando hasta meterlo en vereda y terminó convenciendo a todos, en otra faena admirable que remató de una buena estocada para cortar una merecida oreja.

Y Macías abrevió delante del cuarto debido a la falta de interés que mostró el toro en su muleta.

El quinto no valía nada y la labor del madrileño pasó inadvertida, ya cuando el público comenzaba a distraerse hasta que saltó el sexto a la arena y su alegría inicial devolvió a levantar una algarabía que se había diluido.

Parecía que este toro iba a ser de triunfo grande, pero se desfondó después de haber cogido a Arturo, que comenzó su faena gallardamente en los medios. Maltrecho y dolorido, Macías volvió a la brega sin la colaboración del toro.

Y aunque José Tomás había estado más que bien, decidió regalar un toro de la misma ganadería. La gente recibió con beneplácito el detalle, y espero a que la faena tomara vuelo, hecho que ocurrió cuando el madrileño se colocó en las cercanías y se pasó a milímetros las embestidas de un toro que se resistía a acudir a los cites.

Estoico, vertical, sin inmutarse para nada, José Tomás construyó otra faena donde todo lo hizo él, y de no haber tardado tanto el de Xajay en doblar seguramente le hubiese cortado la oreja que permitía su salida a hombros.

Un atisbo de coba pareció rondar alrededor de la figura de José Tomás cuando izaban a Macías, pero si hay alguien en esta Fiesta que no se da coba es precisamente éste hombre, que apartó a los aduladores y empezó a andar por el ruedo, cobijado por una cerrada ovación que se prolongó cuando Macías salía de la plaza en volandas, por derecho propio.

Así terminó el dichoso mano a mano entre dos toreros distintos, ambos tocados por la misma raza. Ahora el mexicano se fue por delante, y a mucha honra. Qué bien supo ese grito de ¡Arriba Aguascalientes’n! Sólo nos falto la famosa "Pelea de Gallos", que hubiera caído como anillo al dedo esta tarde en La México.

Ficha
Cuarta corrida de la Temporada Grande. Tres cuartos de entrada (unas 35 mil personas) en tarde soleada y fresca, con algunas ráfagas de viento. Siete toros de Xajay, el último como regalo, bien presentados y varios de armoniosas hechuras, de los que destacó el 2o. por su calidad. Otros dieron escaso juego y se apagaron pronto. Pesos: 502, 480, 485, 491, 505, 493 y 485 kilos. José Tomás (barquillo y oro): Vuelta tras fuerte petición, oreja, palmas y ovación tras aviso en el de regalo. Arturo Macías (grana y oro): Dos orejas con petición de rabo, palmas y palmas. El sobresaliente, Christian Ortega, hizo un buen quite al 6o. Destacó en banderillas Armando Ramírez, que saludó tras banderillear al 6o. Macías salió a hombros.




Arrebatan la gloria a Arturo Macías
Por: Sergio Hidalgo



Afuera de la plaza













Una gran entrada













José Tomás


















Serenidad













Sapiencia













Arturo Macias


















Mirando muy alto


















Sentimiento


















Los colores de Xajay


















Javier Sordo


















Carlos Slim Helú


















José Arturo Huerta


















Los Alemán, amor eterno













Joaquín López Dóriga


















González Iñarritu


















Lance espectacular













Maestría













Sin moverse ni un centímetro













Aguantando a pies juntos













Elegancia













Remate de ensueño













Templando a "Palomo Querido"













Espectacular













Disfrutando del toreo













De maestro













El teléfono













Por alto













Desdén


















En todo lo alto













Gran faena


















Aguante













En el camino del toro













Escalofriante













Por gaoneras













Valiente













¡Oleeeeé !













Girando la cintura













Trincherilla













Dominio total













Supremo


















Exponiendo


















Dramatismo













A un tiempo


















El sabor del triunfo













El apunte: De villamelones y aficionados
Domingo, 29 de Noviembre del 2009 México, D.F.
Por: Ceci Lizardi
Si hubiere un tratado de socio-tauromaquia mexicana o una teoría social del toreo de la Plaza México, no me cabe la menor duda de que sería un estudio digno de leerse a conciencia, y quizá el primer tema de nuestro tratado abordaría la conducta del público que asiste a este singular escenario.

Sabemos que a los toros, además de todas esas personas que estudian, conocen y se interesan por el mundo del toro (a los que llamaríamos "aficionados") acuden los que se aparecen cuando actúa el torero de moda (a los que llamaríamos "público ocasional", o como dice el argot socio-taurino: "villamelones"). Pero independientemente de cómo se les llame, lo cierto es que tan importantes son unos como los otros, y en la corrida de hoy concurrieron ambos, todos juntos pero no revueltos.

En efecto, aficionados de toda la República se dieron cita para presenciar al "Principe del Toreo", como le gritaban por ahí a José Tomás, y el "público ocasional" fue a verlo porque se enteró de que es algo así como el mejor de los toreros.

Alejandro González Inárritu, el director de cine mexicano nominado al Oscar en varias ocasiones, presenció el festejo acompañado de Rafael Herrerías -quien por cierto y para no variar con su polémica forma de ser, se llevó una rechifla cuando Arturo Macías lo abrazó efusivamente al festejar su triunfo-, y el toro que regaló el de Galapagar, originalmente llamado "Despacito" fue rebautizado con el nombre de "Babel", una de los largometrajes más destacados del Negro, como apodan al reconocido cineasta.

También asistieron a la plaza el multi millonario Carlos Slim, tercer hombre más rico del mundo según el estudio de Forbes en el 2009, a quien Macías brindó su segundo toro, y algunos políticos que siempre se han servido de la fFesta como plataforma social. Lo bueno es que la plaza estaba casi llena, y eso, para aquél que nunca lo ha presenciado, es un espectáculo sin igual.

Tanta gente se dio cita en La México que el caos vial no se hizo esperar; los programas oficiales se agotaron, y hasta la clásica taquería de solera tradición taurina "El Villamelón" fue clausurada pasadas las cuatro de la tarde, por la gran cantidad de gente que se encontraba cosumiendo bebidas alcohólicas en la calle y en la banqueta.

El segundo tema de nuestro tratado sería el referente a la concesión de los premios. Ya se anunciaba a mitad de semana que para esta tarde volvía el juez Miguel Ángel Cardona, apodado "El grande Cardona" por su elevada estatura, por ser un juez medianamente constante en su criterio taurino.

Antes de entrar a la plaza comentó en corto que volvía para devolverle a La México la seriedad que merecía, ya que en los últimos años hemos padecido una apendicitis aguda nada saludable para la seriedad que debe de darse a tan magno escenario.

Lo malo es que no supo encontrar el justo medio, pues como dice el dicho: "ni tanto que queme al Santo, ni tanto que no el alumbre", porque en el primer toro de José Tomás se negó rotundamente a conceder una oreja de ley a pesar de que la petición era abrumadoramente mayoritaria, olvidando que el Reglamento del Distrito Federal, claramente establece, en su Artículo 72, que "la primera oreja será otorgada cuando una visible mayoría de espectadores la solicite ondeando sus pañuelos u otro objeto visible y si la estocada se ha ejecutado correctamente", cosa que sí acontenció, aunque el de Galapagar haya tenido que hacer uso de un efectivo golpe de descabello para dar muerte al toro.

Hay que decirle al señor juez que una cosa es ser estricto y otra es ser insensible; y por eso, a partir de entonces la madre de El grande Cardona se hizo muy presente, porque -y este sería el tercer punto de nuestro tratado- la afición capitalina tiene poca memoria a largo plazo pero demasiada al corto, y cuando se enoja en una tarde no hay poder humano que la contente.

Así, el enfado continuó cuando en alguna parte de la plaza se pidió que se le concediera el rabo a Macías. ¿Pues no nos quejábamos de que los rabos en la México estaban de oferta? Lo que sucede, y así lo decía un aficionado atrás de mí, es que no hay congruencia en lo que sucede domingo tras domingo y no hay continuidad en los criterios que se utilizan a la hora de la concesión de los premios.

Lo cierto es que después de todo, tardes como la de hoy y carteles como éstos, son los que revitalizan la afición, entendiéndola como una cualidad que atañe a cualquier persona que disfruta con el arte del toreo, independientemente de su nivel de conocimientos en tan compleja materia.


Resumen de video del debut de Diego Silveti
Domingo, 29 de Noviembre del 2009 México, D.F.
Por: Redacción
Emilio Méndez nos ofrece el resumen de video de la corrida mixta del viernes pasado en Juriquilla, donde debutó Diego Silveti como novillero en México, al lado de El Juli e Ignacio Garibay, que cotaron orejas en una noche muy entretenida.




Plaza de Toros Provincia Juriquilla 27-nov-09





En Lima salen a hombros Ponce y Manzanares
EFE/Lima, Perú
Los diestros españoles Enrique Ponce y José María Manzanares no defraudaron en la cuarta corrida de la Feria del Señor de los Milagros en Lima, en donde el francés Sebastián Castella tuvo menor fortuna tanto con su lote como con la espada.
Enrique Ponce da lecciones cada tarde. Su maestría va a la par que su intención manifiesta por gustar. Calidad muletera y técnica sutil, casi perfecta logran que el público se vuelque casi siempre con su toreo aquilatado.
No fue menos lo realizado en Acho. Tuvo dos toros distintos, uno noble, si bien se apagó poco a poco, y otro, el de Puga, que no rompió nunca para adelante.
Dos trasteos por tanto distintos. Dos modelos de creación artística.
Al primero no lo exigió de entrada. Fue después engarzando series unas menos exigentes que otras, puntuales de acuerdo a la embestida del toro que fue apagándose tras una faena larga. Faena que con la derecha tuvo sus mejores momentos, ya que con la izquierda el astado colombiano no remataba. La estocada fue desprendida.
En el cuarto que se paraba y calamocheaba, protestando los muletazos, intenta que éste rompa, atacándolo en algún momento logrando dos series impecables. Insiste con el zapatillazo que procura despertar al toro de su sosería siendo el trasteo también largo pero seguido siempre con interés por el público, sobre todo el de sol, muy entregado al maestro valenciano.
Sebastián Castella venía a por todas. Fue buena su faena al segundo, al que mató de estocada deficiente lo que apagó el entusiasmo e inhibió a quienes tuvieron el pañuelo durante la faena, listo para la petición de orejas.
El toro fue noble, y el francés esperó que metiera siempre la cara para tirar de él en muletazos largos y coreados. Pedía el toro por el izquierdo que lo atacara más, y que lo alegrase, cosa que hace al inicio de las tandas, pero después a corta distancia con muletazos de su repertorio.
El quinto fue abucheado por su falta de trapío, y un esqueleto que cargaba menos kilos que los que se anunciaban en la tablilla. El de Puga fue tardo y sin calidad y el público no atendió a la faena lo que terminó por descorazonar al galo Castella, quien pinchó en numerosas oportunidades.
Manzanares también cumplió largamente la papeleta. Su primero tomó a regañadientes la muleta, sin querer entregarse nunca, justito además de fuerzas, con muletazos mimosos ante la falta de pujanza del toro. Su técnica y el empaque de algunos bellos muletazos le valen la oreja, tanto como su rotundo uso de la espada.
En el sexto, que se movió con transmisión, el alicantino desplegó su toreo luminoso, pero hacia el final de la faena el toro se apagó y deslució. Manzanares mató con eficacia y le valió otra oreja y la salida a hombros junto con Ponce.


Extraordinario mano a mano, Macías dos orejas; José Tomás una
NOTIMEX/México, D.F.
El torero HIDROCALIDO Arturo Macías demostró sus ganas de ser una figura del toreo, al llevarse el mano a mano con el español José Tomás en la plaza México, tras cortar dos orejas por una de su alternante.
En lo que fue la cuarta corrida de la temporada Grande 2009-10 en la casi repleta plaza México, los dos destacados diestros lidiaron un encierro de la ganadería Xajay, el cual resultó de buena presencia aunque de juego bastante irregular.
En medio de un magnífico ambiente, José Tomás, máxima figura de la actualidad taurina mundial, y Macías brindaron una gran tarde de toros al público, al mostrar un enorme profesionalismo y una entrega que fue premiada con los aplausos.
El «Príncipe de Galapagar» abrió la tarde con «Tú y las nubes», de 502 kilos, con el que mostró empaque, ganas y mucha determinación por lograr una faena del agrado del público, ante un toro de poco recorrido y juego, pero al que obligó a pasar.
Luego de conseguir una faena variada y lucida, José Tomás mató de espadazo trasero y un descabello, y a pesar de la fuerte petición del público, el juez Miguel Angel Cardona no premió, pero el público sí con una merecida vuelta al ruedo.
Con su segundo toro, «Palomo querido» (485 kilos), el ibérico se jugó la vida al pasarse el toro a escasos centímetros de su cuerpo, tanto con la capa como con la muleta, ante los gritos de «¡torero, torero!» y los consabidos olés.
Luego de cansarse de pasar al toro por su muleta por delante y por detrás y sin mover los pies ni siquiera para voltearse, José Tomás despachó de espadazo certero, para cortar una merecida oreja, aunque el público pidió la segunda, no concedida.
Con el quinto de la tarde, «Qué te vaya bonito» (505 kilos), el maestro español poco pudo lograr, luego que el burel no respondió, sin embargo, se pasó de nueva cuenta al toro a escasos milímetros de su cuerpo, el cual era trompicado en cada pase.
Empeñoso y voluntarioso, Tomás mató de espadazo y descabello para escuchar aplausos. No conforme, el madrileño decidió regalar un séptimo toro, con la clara idea de triunfar en una plaza que le sienta bien.
Con «Babel», (485 kilos), José Tomás trató de mejorar su labor anterior, hasta conseguir un verdadero arrimón de valor, de mucha vergüenza profesional y empeño, en el que se jugó la vida con tal de triunfar y de agradar al aficionado mexicano.
Tomás se enfrentó a un burel soso y sin recorrido, al que obligó a pasar por su muleta, en algo que fue premiado por el público con aplausos y gritos de «¡torero!». Luego de arriesgarse, mató de media ración, se llevó un aviso y escuchó fuerte ovación.
Macías se consagró con «Cuatro caminos», de 480 kilos, al lograr una faena templada, valiente y bien estructurada, ante un noble ejemplar que le permitió de todo, ante la emoción del público que se cansó de gritarle «¡torero!» y brindarle sentidos olés.
Lució con la capa y muleta, en un trasteo bastante lucido y empeñoso en plena cara de su rival, que colaboró de buena manera. Despachó de un espadazo fulminante que le valió para dos orejas y que tuvo petición de rabo no concedida por el exigente juez.
Con «Siete mares» (491 kilos), Macías poco pudo hacer, luego que el toro resultó malo y soso, sin embargo, mostró empeño y ganas por lucir. Mató de un espadazo en buen sitio y se fue con aplausos.
Arturo Macías terminó su destacada labor con «Pa’ todo el año» (493 kilos), con el que sufrió un tremendo revolcón, el cual hizo temer lo peor, ya que luego de ser arrollado, tras citar de rodillas, fue sacado por los monosabios rumbo a la enfermería.
Sin embargo, Macías se levantó, sin zapatillas y aún dolido por la paliza recibida, continuó su valiente labor en busca de más triunfo, el cual ya no logró. Mató de pinchazo, un descabello y se fue con aplausos.
Para el próximo domingo se dará la reaparición en los ruedos del retirado aguascalentense Miguel Espinosa «Armillita», quien confirmará la alternativa del español Cayetano Rivera, junto al queretano Octavio García «El Payo», con toros de la ganadería de Arroyo Zarco.



MÉXICO IMPORTANTE FAENA DEL MEXICANO
José Tomás corta oreja y da otra vuelta y gran faena de Macías en La México
BURLADERO.COM - 29/11/2009 23:16

José Tomás dando la vuelta al ruedo esta noche en La México. - Foto: TADEO ALCINA
José Tomás se ha tenido que conformar con cortar una oreja y dar otra vuelta al ruedo en su regreso a la plaza de toros de La México, donde Arturo Macías ha cuajado una de sus mejores faenas de su carrera y ha logrado cortar dos orejas con fuerte petición de rabo. Números aparte, el diestro de Galapagar ha estado muy por encima de sus cuatro toros de Xajay, demasiados al límite de la casta y con poca transmisión.

El primer toro de Xajay, de finas hechuras, logró desarmar al torero de Galapagar en los primeros lances a la verónica, teniendo que ‘tomar el olivo’. Desde ese momento, todo fue a más. Tras el tercio de varas, José Tomás se fue a los medios y logró resarcirse con un ramillete de verónicas de mano baja y mucha plasticidad.

La faena de muleta a ‘Tú y las nubes’ se ha desarrollado, al completo en los medios, a donde se lo sacó con mucha despaciosidad, rematando con un precioso pase del desdén. Rápidamente se echó la muleta a la mano izquierda, en dos series con temple y poder pero teniendo que rematar por alto en cada muletazo, ante un ejemplar de Xajay que se lo pensaba y era remiso a embestir.

Tras dar otro respiro a su toro, la faena fue creciendo en interés. Primero, en un soberbio cambio de mano para echarse la muleta a la izquierda, en un palmo de terreno, combinando naturales de mucho temple, de uno en uno, con afarolados y pases de la firma, siempre en cercanías. El de Xajay se fue quedando poco a poco más corto pero José Tomás logró que la faena no sólo no bajara de interés sino que se metió entre los pitones, con mucha intensidad, ligando derechazos de muchísimo mérito.

Los remates finales, trincheras, molinetes y cambios de mano desataron la locura. Tenía una oreja en su mano, pero el uso del verduguillo hizo que todo quedara en una vuelta al ruedo tras una fuerte y mayoritaria petición.

Sí que paseó un apéndice del que hizo tercero, un toro incierto que se inventó José Tomás. El madrileño desplegó todo su repertorio de firmeza, poder y valor y sobre todo, mucho mérito teniendo en cuenta la poca clase y casta del de Xajay.

Nadie apostaba por la faena ni el triunfo de José Tomás, que sólo tardó dos series de derechazos para 'meter en el canasto' al de Xajay, en muletazos poderosos y rotundos, de mano baja, aguantando parones y miradas. Hubo entrega y valor sincero por parte del de Galapagar, que puso al público en pie en varios naturales de muñeca rota, siempre a más. Tras la estocada, cayó el toro y le concedieron un más que merecido trofeo.

No pudo redondear la tarde en el quinto, que embistió con la cara alta y tuvo querencia a tablas. Un espectacular quite por gaoneras, pasándose al toro a milímetros del cuerpo, precedió a una faena que nunca terminó de tomar vuelo, con el toro rajándose. Lo intentó por ambos pitones Tomás, que se volvió a justificar.

Con todo ello, José Tomás decidió regalar el sobrero. Y más de lo mismo. Otro Xajay de brusca embestida que punteaba los engaños, al que toreó de manera espectacular por un quite por tafalleras y con el se la jugó en la muleta, siempre en terrenos de cercanías. La faena, marcada por el valor, no logró terminar de caldear los tendidos. A pesar de eso, podría haber paseado un apéndice, pero el toro tardó en caer y la gente comenzó a abandonar la plaza tras casi tres horas y media de festejo.

Sí que salió a hombros con dos orejas Arturo Macías, que ha realizado una de sus mejores faenas de su trayectoria. Y eso que no comenzó bien 'El Cejas' que nada más abrirse con el capote fue volteado de forma dramática. Tras unos instantes de angustia y cuando iba a ser trasladado a la enfermería, volvió a la cara del toro con total disposición.

Tras un vibrante tercio de banderillas, Macías firmó una bella faena de muleta a un noble ejemplar de Xajay, al que toreó con gusto, ligazón y mano baja, en series muy largas y despaciosidad. Tras la estocada, le concedieron los dos apéndices y se vio obligado a dar dos vueltas al ruedo.

Pero tras este triunfo, Macías se fue viniendo abajo con el transcurso de la tarde. Se contagió de la sosa y mansa embestida de su segundo mientras que el sexto, al que toreó bien el capote y volvió a banderillear, sufrió una fortísima voltereta al comienzo de faena de la que quedó seriamente mermado. Lo intentó, sin eco en los tendidos.

FICHA DE LA TERCERA DE LA TEMPORADA GRANDE EN MÉXICO
La México. Domingo 29 de noviembre. 3ª Temporada Grande. Tres cuartos. Lleno en los tendidos numerados.

Toros de Xajay, 1º bien presentado y a menos. 2º noble. 3º incierto. 4º manso. 5º descastado. 7º brusco.

José Tomás, vuelta al ruedo, oreja, silencio y división en el toro de regalo.Arturo Macías, dos orejas y dos vueltas al ruedo tras petición de rabo, silencio y silencio.


JORNADA DOMINICAL EN RUEDOS AZTECAS
El Juli suma un nuevo triunfo en México, esta vez en Saltillo
BURLADERO.COM - 30/11/2009 08:05

A continuación les ofrecemos el resultado del resto de festejos celebrados la jornada dominical en ruedos mexicanos:

SALTILLO (Coahuila). Lleno. Toros de La Estancia, manejables en conjunto. Zotoluco, silencio y dos orejas. El Juli, saludos y dos orejas. Ignacio Garibay, oreja y oreja.

SAN ANDRÉS AHUAHUASTEPEC (Tlaxcala). Dos tercios de plaza. Toros de Rancho Seco, de buen juego. Alfredo Gutiérrez, vuelta al ruedo y dos orejas. José Luis Angelino, oreja y dos orejas.

HOLOCH (Yucatán). Lleno. Toros de Miguel Rodríguez, manejables. El rejoneador Pedro Louceiro, oreja y silencio. Humberto Flores, dos orejas y oreja.

TEHUACAN (Puebla). Tres cuartos de plaza. Tres toros de De Haro y uno (4º) de Zacatepec, premiado con arrastre lento. Manuel Rocha "El Rifao", silencio y oreja. David Aguilar, oreja y dos orejas. El Pana llegó a la plaza en estado de embriagez y las autoridades no le permitieron torear. Su lugar fue ocupado por El Rifao.


LIMA AMBOS TOREROS, POR ENCIMA DE LOS TOROS
Ponce y Manzanares salen en hombros en Lima
BURLADERO.COM - 29/11/2009 21:56

El valenciano Enrique Ponce y el alicantino José María Manzanares han abierto la Puerta Grande del bicentenario coso de Acho presentando ambos su candidatura al Escapulario de Oro en la cuarta de la Feria del Señor de los Milagros.

Ponce ha sumado dos orejas en la cuarta de la Feria del Señor de los Milagros en Lima, después de cortar un trofeo a cada uno de sus dos toros de La Ahumada. Dos animales distintos, un primero noble aunque justo de raza de La Ahumada, con un buen pitón derecho, que sirvió a un inspirado Ponce para recrearse y exprimir al toro sobre esa mano con gran plasticidad, embebiendo la embestida con suavidad en la muleta y llegando mucho al público.

Por el izquierdo, el toro lo vendía más caro y no pudo Ponce redondear la obra al natural. Sin embargo, el toro tardó en echarse tras enterrar la espada Ponce y el premio al valenciano pudo verse reducido.

El segundo, por contra, fue un animal muy bajo de raza al que Ponce le arrancó el trofeo después de una faena esforzada y de largo metraje en la que fue consintiendo y exprimiendo al toro hasta robarle muletazos que le valieron el reconocimiento de la plaza. Remató de una muy buena estocada y selló la Puerta Grande.

El alicantino José María Manzanares, por su parte, paseó otra oreja del tercero de Roberto Puga, un toro con las fuerzas justas aunque con calidad en su embestida al que el alicantino entendió en una faena a más, que terminó extrayendo muletazos de alta nota sobre todo por el pitón izquierdo, el bueno del toro, en los que Manzanares dejó patente su clase en naturales sueltos aunque de notable ejecución. Remató José Mari de una gran estocada.

Con el sexto volvió Manzanares a encandilar una plaza que idolatraba a su padre y que se ha entregado con el hijo. De nuevo caló en los tendidos la estética y las formas de Manzanares que cuajó series de muletazos meritorios a un toro que no acabó de entregarse y remachando de otra gran estocada.

Sebastián Castella sorteó un primer toro con más temperamento que el que abrió plaza pero que duró muy poco. El toro, que se vino arriba en banderillas, propició la emoción de un ajustado y expuesto comienzo de faena por estatuarios que levantó al público. Sin embargo, el de La Ahumada fue acortando el recorrido y Castella comenzó a usurparle terrenos, buscando la emoción sin éxito en cercanías. Remató de una estocada trasera, haciendo uso del descabello. Con el quinto, no levantó la tarde del francés. Ni toro ni torero transmitieron en una faena sin relieve alguno.

FICHA DE LA CUARTA DE LA FERIA DE LIMA

Lima (Perú). Domingo 29 de Noviembre. 4ª de Feria. Tres cuartos de entrada

Toros de La Ahumada (1º, 2º y 6º) y Roberto Puga (3º, 4º y 5º), desiguales de presentación y juego.

Enrique Ponce, oreja tras aviso y oreja.
Sebastián Castella, ovación y silencio.
José María Manzanares, oreja en ambos.


CUVILLO VUELVE A LIDIAR EN RUEDOS FRANCESES
Cuvillo: 'Si José Tomás no torea en Sevilla la corrida irá para Málaga'

BURLADERO.COM - 30/11/2009 08:28
El ganadero Álvaro Núñez del Cuvillo reconoce hoy, en una entrevista que publica Luis Nieto en Diario de Sevilla que la corrida prevista para Sevilla está apartada en el campo: "El precio está cerrado. Pero si José Tomás no torea en Sevilla el Domingo de Resurrección, la corrida irá para Málaga. No quiero que se malinterpreten mis palabras. Resulta que José Tomás se ha quedado fuera de Sevilla los tres últimos años, sin ni siquiera hablar de dinero, porque pedía nuestra corrida; y ahora, en correspondencia, es lógico que para nosotros sea él uno de los toreros que lidie ese día la corrida. De lo contrario, el encierro irá para Málaga, aunque perderíamos 24.000 euros. A nosotros nos interesa mucho que José Tomás toree la corrida en Sevilla", asegura el criador.

De esta forma, su regreso al coso del baratillo supondría dar por zanjada la polémica de las últimas temporadas con la empresa comandada por Eduardo Canorea y Ramón Valencia: "No se trata de hablar de batallas. En Sevilla nos tienen que pagar, al menos, como en el resto de plazas de primera categoría donde lidiamos, sin llegar a la de Madrid. Lo que no aceptábamos es el mismo precio de hace más de una década", asegura el criador gaditano.

La ganadería de Cuvillo tiene prácticamente cerrados los destinos de su camada para la próxima temporada, que, como novedad, contará con la presencia en los cosos franceses de Nîmes, Bèziers y Bayona, a los que podrían sumarse los de Dax y Mont de Marsan. Además, Cuvillo lidiará tres tardes en Madrid, volverá a Bilbao, presumiblemente a Sevilla y repetirá en Valencia, Barcelona, Zaragoza, San Sebastián, Santander, Vitoria, Jerez, Granada y Huelva. Otra corrida está prevista para Olivenza.


PARA RECUPERAR LOS TOROS EN RTVE
La Mesa del Toro pide una reunión con el nuevo presidente de RTVE
BURLADERO.COM - 30/11/2009 21:03

Los integrantes de la Mesa del Toro. - Foto: ARCHIVO
La Mesa del Toro ha solicitado formalmente una reunión con Alberto Oliart, nuevo presidente de Radio Televisión Española, con el objetivo de "analizar el tratamiento que la televisión y radio públicas dan a la tauromaquia" así como recuperar las retransmisiones de corridas de toros en televisión y el regreso del programa ‘Clarín'.

En la misiva que han hecho llegar al sucesor de Luis Fernández, la Mesa subraya que "las corridas son el segundo espectáculo de masas en España, lo que significa un activo tradicional, económico y social. Los toros datan del siglo XV, generan anualmente en torno a 2.500 millones de euros y son las bases de las fiestas populares de más de 5.800 municipios":

En la carta también se denuncia que "la atención de RTVE a la información y a la divulgación taurina ha sufrido una alarmante disminución, sin haber obtenido razones. Como mucho se han aducido razones presupuestaria, algo que no parecen afectar por igual a otras actividades culturales, recreativas y deportivas".


QUITO SAMPER DA UNA VUELTA EN SU DOCTORADO
Sebastián Castella triunfa con fuerza y oreja para El Fandi en Quinto
BURLADERO.COM - 30/11/2009 21:16

Sebastián Castella ha presentado sus credenciales en la plaza de toros de Quito y ha cortado dos orejas en el segundo festejo de la feria, donde El Fandi se llevó el lote más desrazado y en la que tomó la alternativa el diestro local Álvaro Samper.

El torero galo paseó los dos apéndices del quinto ejemplar de Vistahermosa, un animal con transmisión al que toreó casi siempre en terrenos de cercanías, a un palmo de los pitones en muletazos de profundidad y sobre todo, poder en las muñecas. Mató de una estocada entera y le concedieron los dos apéndices. Anteriormente, Castella escuchó palmas con el buen tercero, un toro de bondadosa embestida al que comenzó a torear en los medios y rayó a buen nivel en varias series de derechazos. Lo emborronó con la espada.

El Fandi, que hacía su segundo paseíllo en Quito, cortó la oreja de su primer ejemplar de Vistahermosa, toro complicado que buscaba siempre al torero y punteaba los engaños, con el que hizo un esfuerzo y llegó a ‘prender' la faena. El cuarto tuvo querencia de manso y en tablas le desarrolló casi toda la faena, siempre tapándole la salida. El animal se lesionó y el granadino tuvo que abreviar.

El local Álvaro Samper dio una vuelta al ruedo en el toro de su alternativa, que le volteó de mala manera... aunque sin consecuencias. Con el buen sexto, evidenció estar todavía demasiado nuevo si bien intentó tapar sus lógicas carencias, con ganas y voluntad de agradar. Dio una vuelta.

FICHA DE LA SEGUNDA DE LA FERIA DE QUITO
Quito (Ecuador). Lunes 30 de noviembre. Lleno.

Toros de Vistahermosa, desiguales de juego.

El Fandi, oreja y ovación.
Sebastián Castella, palmas y dos orejas.
Álvaro Samper, que tomaba la alternativa, vuelta al ruedo y palmas.


MÁS CAMBIOS EN ESTE INTENSO INVIERNO
Alejandro Esplá será apoderado por Juan Oliver
BURLADERO.COM - 30/11/2009 20:33

Alejandro Esplá, en un remate, hoy en Castellón
El novillero alicantino Alejandro Esplá ha llegado a un acuerdo de apoderamiento con Juan Oliver, persona vinculada al mundo del toro y padre de los subalternos Álvaro y Daniel Oliver. Francisco Sánchez, quien apoderó a Luis Francisco Esplá en sus últimas temporadas y el propio padre ejercerán las funciones de asesores.

Hasta la pasada temporada, Alejandro estuvo apoderado por los empresarios Simón Casas, cuando a mitad del año decidieron poner punto y final a su relación.




El Cejas’ corta dos orejas y sale a hombros
Arturo Macías se engrandece

El mexicano gana el mano a mano al español José Tomas

DON NETO
Amables amigos, se torea con el cuerpo y se templa con el alma… estas palabras las dije hace muchos, pero muchos años cuando vi torear en una plaza, precisamente con ese temple que nace del alma del torero que la posee. Y esto viene a colación porque ayer en la Plaza México, el autentico triunfador de ese insólito mano a mano entre el diestro de Galapagar José Tomas y el torero de Aguascalientes, Arturo Macías ‘el Cejas’, fue este último, el joven torero hidrocálido que cortó dos orejas negándole el absurdo juez de plaza un merecido rabo, pero no fue obstáculo para que al final de la tarde saliera a hombros del coso capitalino.
Pero como es costumbre diré principiando mi comentario que la entrada fue estupenda, pero… ¡no se lleno el coso como se esperaba! El encierro de Xajay propiedad de Sordo Madaleno, tuvo un toro estupendo el corrido en segundo lugar de nombre ‘Cuatrocaminos’ y que mereció sin duda alguna un arrastre lento, pero el principiante de juez de plaza, Miguel Ángel Cardona no se enteró de ese estilo magnifico que desarrolló ese ejemplar. Los seis restantes –porque se regaló el séptimo del perdón- tuvieron de todo menos el estilo apropiado para lograr un triunfo con ellos.
JOSÉ TOMAS sigue con su toreo tremendista, aunque no quieran definirlo así muchos que van a la plaza. Se arrima como los hombres, se juega la vida como el que más, pero torea con el cuerpo y no templa con el alma. Con el primero de nombre ‘Tú y las nubes’ que fue débil y quedado, hizo su toreo de costumbre, logrando derechazos y naturales expuestos en todo momento y como terminó de una estocada y un descabello sólo dio una vuelta al ruedo. Su segundo fue ‘Palomo querido’ un astado de embestida incierta y con el cual el madrileño se lució en un valientísimo quite por chicuelinas y un toreo muleteril y ya por derechazos y ya por naturales y cambios por la espalda. Terminó su trasteo temerario de una estocada y se le entregó una oreja dando con ella vuelta al ruedo. Su tercero, quinto de la tarde se llamo ‘Que te vaya bien’ y volvió a lucir su toreo valientísimo en chicuelinas porque no pudo torear aseadamente por verónica. Después logró un quite atropellado por gaoneras y con la franela lo de todo momento: derechazos, naturales, manoletinas con un valor a toda prueba y finalmente una estocada trasera y un descabella. Escuchó aplausos pero regaló el torito del perdón y con él lo mismo de sus actuaciones anteriores: nada con el percal inicialmente, un quite atropellado y con la muleta pases y pases valientes, pero sin clase, es decir, que repito una vez más, se torea con el cuerpo, pero se templa con el alma.
ARTURO MACÍAS ‘EL CEJAS’ en cambio templó con el alma en su primera faena a ese estupendo toro ‘Cuatro caminos’. Inició su actuación con torerísimas chicuelinas siendo cogido feamente al intentar la segunda, pero volvió a la cara del toro y cuajó un quite por gaoneras plenas de arte y temple y con la muleta inició su trasteo con el péndulo en el centro del anillo sin mover las pestañas demostrando que también en México se sabe torear en esa forma. Para continuar vinieron los derechazos, naturales, cambio de muleta, todo esto ribeteado su trasteo con clase, valor, verticalidad, sin ensimismo alguno, llevando el temple en el alma y rubricando esa bellísima y auténtica faena con un estoconazo RECIBIENDO, algo que el miope juez de plaza no vio porque ese solo hecho merecía el rabo para el torero, sin embargo se le entregaron al cejas dos orejas y con ella dio vueltas al ruedo mientras al juez le recordaban en el tendido, todo lo recordable. Por eso para mi gusto Arturo Macías ‘el Cejas’ fue el triunfador del mano a mano celebrado. Con su segundo ‘Siete mares’ intentó el arte pero el burel no permitió nada ya que fue suelto, distraído y sin clase alguna. El torero de Aguascalientes fue aplaudido al terminar su labor con el sexto de nombre ‘Para todo el año’, en el que fue dramáticamente cogido al intentar un derechazo de rodillas y de allí para delante su voluntad fue mucha pero sus facultades físicas no fueron las mismas y terminó su actuación siendo ovacionado.
Al final de la justa salió merecidamente a hombros, como auténtico triunfador de la tarde porque repito, se torea con el cuerpo, pero se templa con el alma y el cejas toreo con el alma ayer tarde en la Plaza México.




30.11.2009
4ª de temporada en La México. Macías se fue por delante de Tomás

Por Octavio Lagunes

El esperado y muy publicitado mano a mano por parte de José Tomás se lo llevó El Cejas.

México D F. Cuarta de la temporada grande. Tres cuartos de plaza, la mejor entrada de la temporada. Siete toros de Xajay nobles y descastados. Destacó el segundo que fue noble e iba de largo. Mereció arrastre lento. José Tomás: Petición negada con ovación. Oreja. Ovación. Aviso y ovación. Arturo Macías: dos orejas con petición de rabo. Silencio. Ovación.

Desde la queretana exhacienda La Laja, Xavier Sordo envió siete ejemplares con digna presencia, nobles y faltos de raza. Solo destacó el segundo, al que el juez Rafael Cardona le faltó premiarlo con arrastre lento. También fue censurado por su mesura en otorgar orejas por lo que la gente se metió con él por negarle una oreja a Tomas en su primero y el rabo a Macías.

El madrileño Tomás transmitió a los tendidos en todo momento. Abrió plaza para torear ajustadamente aunque de muleta no todos los pases destacaron por limpios. Le enganchan en demasía el engaño. Mató de entera contraria algo tendida y le fue concedida la oreja que pedían sus partidarios. Terminó por dar una vuelta al ruedo entre clamores. En su segundo se mostró aseado para torear con mucho temple y quietud de pies y ahora si, pasear una oreja bien cortada. En el quinto se mostró bien de capa. De muleta se le vio quieto de pies, valiente y dominador. Mató de tres cuartos de estoque para escuchar ovación. Regaló uno más de la misma ganadería para pegar un escalofriante quite por tafalleras y de muleta torear erguido comunicando con la galería en sus estatuarios de cierre de faena. Escuchó un aviso y se retiró entre ovaciones.

EL hidrocálido Arturo Macías acabó por apretar a Tomás y ganarle la pelea, a pesar de estar menos toreado y publicitado. En su primero recibió de capa y fue aparatosamente levantado. Se pensó que Tomás se quedaría con el resto de la corrida, sin embargo, no fue así. Se repuso Macías para pegar un escalofriante quite por gaoneras que puso a la plaza de pie. Pegó muletazos suaves y templados al mejor toro de la corrida; sin embargo la faena no fue a más. Mato de entera recibiendo para cortar dos orejas con petición de rabo. En su segundo estuvo bien de capa aunque de muleta mostró pocos recursos técnicos. En el sexto de capa se mostró quieto con los pies fijos. Inexplicablemente le dio por empezar la de muleta arrodillado, y al segundo pase fue aparatosamente cogido sin consecuencias. Terminó como pudo para escuchar ovación y salir a hombros al término de la corrida. Sin duda luce mas con un toro que le va, más que buscarle las faenas.


30.11.2009
4ª de feria en Lima. Orejas de distinto peso para Ponce, a hombros junto a Manzanares que hizo una gran faena al sexto

Por Fernando Salgado Bambarén

Tarde importante de Enrique Ponce hoy en Lima que logra exprimir y someter al primero de su lote e inventarse una faena en el cuarto dando una gran dimensión de maestría en ambos, mientras Manzanares bordó el toreo en el último de la tarde y dió un estoconazo que le valió la oreja del tercero. Castella no tuvo material aparente para el triunfo. Lo extraño fue el comportamiento del ganado que envió el Dr. Puga esta tarde a Acho. Queriendo y no pudiendo, con nobleza pero viniéndose a menos pronto, cabeceando los dos primeros y parado muy pronto el último además de verse encogido como si estuviera enfermo. Extraño porque hasta hace una semana había enviado de esta misma camada dos toros importantes y uno extraordinario ¿que paso?, ¿que cambió?, preguntas que dejo en el aire. El Juez, como siempre, midiendo las faenas con distinto criterio que demuestran poco conocimiento de la lidia y del toreo en general. Después de la corrida, El Consejo Taurino de Lima entregó el Escapulario de Oro 2008 a Enrique Ponce y el Escapulario de Plata del mismo año al Dr. Roberto Puga en el hotel Golf Los Incas donde se hospeda el maestro de Chiva.

Plaza de toros de Acho en Lima-Perú. Domingo 29 de Noviembre de 2009. Cuarta de abono, tercera corrida de toros. Tarde entoldada pero calurosa. Lleno en sol y tres cuartos de entrada en los tendidos de sombra. Se lidiaron tres toros de la ganadería peruana del doctor Roberto Puga. 3° rebrincado y echando la cara arriba pero noble. 4° Le cuesta embestir y echa la cara arriba al final del muletazo. 5° se acabó pronto y se le ve encogido como enfermo. Tres toros de la ganadería colombiana de La Ahumada. 1° Bueno por el derecho llevandolo tapado, por el izquierdo se queda corto y prueba. 2° Algo soso pero con clase por el derecho, se queda corto y mirón por el izquierdo. 6° noble y humillado por el derecho, rebaña por el izquierdo. Enrique Ponce (Grana y oro): Estocada caida, oreja con petición minoritaria. Estocada trasera, oreja. Sebastián Castella (Espuma de mar y oro): Estocada y dos descabellos, ovación. Cuatro pinchazos, pinchazo hondo y descabello, silencio. José María Manzanares (Nazareno y oro): Estoconazo en la yema, oreja. Gran estocada, oreja.

Qué cariño, conexión y respeto existe entre Enrique Ponce y la afición de Lima. Hoy ese respeto, que conlleva a una gran responsabilidad, se vio claramente reflejado al ver al valenciano inventarse una faena jugándose el tipo muy cerca de los pitones del cuarto de la tarde que, aunque noble, le costaba una barbaridad embestir y echaba la cara arriba al final de los muletazos. Pero como en esto de entender toros Ponce es un especialista, pues le encontró el sitio y distancia para imponerse y demostrar que no solo tiene valor, arte y cabeza sino también pundonor como si estuviera empezando de novillero. Jaló del toro y empujó en cada muletazo aprovechando la nobleza del animal. Si bien es cierto que hubieron varios muletazos enganchados, el conjunto de la obra tuvo muchísimo merito por las condiciones del animal. Lima es una afición sensible pero exigente y cuando ve a un torero estar con un toro como este cuarto de la tarde, se entrega sin reparos a los gritos de torero, torero. Oreja de muchísimo peso y muy justa.

Al primero lo exprimió por el derecho que era el pitón del toro dándole muletazos largos y templados. Por el izquierdo también sacó varios muletazos de uno en uno llevando muy tapado al toro que se quedaba corto y probaba por ese lado. No era fácil a pesar que en las manos del valenciano todo lo que se hace frente a un toro lo parece. Al de la Ahumada había que torearlo bien e imponerse y así lo hizo Ponce. La estocada cayó baja y ese sería el pero para la oreja que concedió el Juez además que la petición fue minoritaria.

Castella venía a por todas y así lo hizo saber en el quite por chicuelinas templadas y ceñidas al primer toro de la tarde pero luego su lote no colaboró. El segundo era soso y por eso le costó al torero francés conectar con el tendido. Poco a poco fue entendiendo al toro y lo obligó a embestir sobre todo en cercanías enroscándoselo por ambos lados rematando las series con el de pecho ligado en un palmo de terreno. Tenía la oreja cortada pero el fallo en el descabello le privó del premio. Con el quinto fue imposible por acabarse prácticamente después del primer muletazo. No es normal que toros de esta ganadería actúen de la manera como fue este. Después del pase cambiado por la espalda en la que el toro se arrancó de largo, se encogió como si algo le doliera o estuviera enfermo. Lo cierto es que después de intentarlo Sebastián tuvo que ir por la espada la cual no usó de manera correcta con un toro parado que no arrancó en ninguna en las veces que el torero entró a matar.

Al que si vimos fue a Manzanares en sus dos toros. En el primero de su lote que llegó a la muleta un poco rebrincado y echando la cara arriba le corrigió el defecto bajándole la mano y no dejando que le tropezara la muleta. Lo mató de una estocada que por sí sola valía la oreja. Debe ser la estocada de la Feria, por lo menos hasta ahora.

En el sexto se vio la dimensión del alicantino. Cómo barrió la arena de Acho en cada muletazo por el derecho bajando mucho la mano y qué largo lo llevó en redondo ligando uno a uno en series de cuatro y cinco muletazos rematados en forma variada por trincheras, cambios de manos, pases de pecho ligados a un segundo llevando al toro cosido a los vuelos de su muleta. Por el izquierdo el toro empezó bien pero luego empezó a rebañar e incluso pudo cogerlo por ese lado cuando lo cuadraba para entrar a matar. Magnífica faena con empaque y torería que hizo crujir los tendidos del bicentenario coso de abajo del puente. Con un espadazo terminó con la vida del último de la tarde y le concedieron una oreja. Pero ¿esta faena era igual a su primera? No, fue mucho más aunque premiada igual. Cosas del juez de Plaza.


30.11.2009
2ª de feria en Quito. Álvaro Samper, listo para su alternativa

Por David Izurieta

Álvaro Samper se ha despedido del escalafón menor con una importante tarde. Más allá de la oreja que obtuvo, el novillero quiteño ha demostrado estar cuajado y con la madurez necesaria para tomar la borla de Matador de Toros. Álvaro Montes ha sido el triunfador numérico de la tarde, gracias a su entregada labor y espectacular doma, aunque sus dos faenas carecieron de la rotundidad que se hubiera querido. Javier Cortés solo pudo justificarse y demostrar su valor y entrega ante un lote sumamente complicado.

Feria de Quito “Jesús del Gran Poder”. 29 de noviembre de 2009. 2ª de abono. Primera novillada de Feria. Casi lleno en tarde de clima variado. Se lidiaron 6 novillos de Mirafuente, correctos de presentación, de juego variado y con poco fondo en línea general. Álvaro Montes, ovación con saludos y dos orejas. Álvaro Samper, de rioja y oro, oreja y palmas. Javier Cortés, de azul marino y oro, silencio en ambos.

Abrió plaza el rejoneador Álvaro Montes, quien tuvo que hacerle frente a “Danzador” de 417 kilos, enemigo poco grato para el caballero pues casi no se enteró de la presencia del jinete durante toda la lidia. Ante eso, el de Jaén echó mano de una excelente doma para conectar con los tendidos y realizó una limpia labor colocando rejones de castigo y banderillas prácticamente a toro parado. Mató de un mete y saca, trasero y fue ovacionado.

Con el segundo de su lote, “Vividor” de 490 kilos, aumentó su entrega y lucimiento, gracias también a que el de Mirafuente se movió más, sin llegar a entregarse. Montes arriesgó mucho y estuvo bastante aseado en la colocación de las banderillas, metiendo al público en el bolsillo gracias a una depurada doma de sus caballos toreros. Curiosamente, el año anterior casi no vimos al colocado de la cuadrilla del jiennense. Pues en esta tarde lo vimos mucho y en más de una ocasión pudo ocurrir una colisión con el peón de brega. Ejecutó Montes la suerte de la rosa con mucho lucimiento y volvió a matar de mete y saca, efectivo pero que ciertamente desluce cualquier labor en el ruedo. El novillo cayó pronto y el público pidió la oreja. El presidente, Don José María Morán, la concedió muy pronto y la parroquia pidió la segunda, amenazando con la bronca a Usía, quien concedió, luego de pensárselo un rato, otro apéndice, algo excesivo para lo que se vio en el ruedo. En mi opinión, una cosa es la doma espectacular, la voluntad y la conexión con el tendido y otra es el salto de los cánones del rejoneo y de juzgar también las condiciones de la res para conceder un segundo trofeo, cosa muy seria cuando la Monumental de Iñaquito es plaza de primera categoría.

Álvaro Samper se despedía de novillero, exactamente a 24 horas de tomar la alternativa en esta misma plaza, hecho poco común en el mundo de los toros. Y creo yo que mejor despedida no podía tener Álvaro. Porque más allá del triunfo, el hasta hoy novillero demostró una madurez y oficio que hacer sentir esperanza a los aficionados de cara a su alternativa y a su futuro como Matador de Toros ecuatoriano. Una importantísima tarde que comenzó a estructurarse con la lidia a “Luctuoso” de 430 kilos, un buen ejemplar de Mirafuente que demostró mucha clase en el capote, cumplió plenamente en varas y que tuvo un gran pitón derecho. Samper se gustó con el percal, saludando por verónicas de muy buena factura y ejecutando un excelente quite por chicuelinas. Ya con la muleta, aprovecho el buen pitón derecho del novillo en varias series de toreo largo y templado. ¡A ese punto debía llegar Álvaro! Hubo momentos de muchísima calidad, series de toreo lento y reposado que llegaron al tendido. Lastima que la estocada, que hizo guardia, le privó de las dos orejas, pese a estar bien colocada. Descabelló muy bien al primer intento y el público le premió con una oreja de mucho peso.

Con el quinto de la tarde, “Salmonero” de 461 kilos, Samper mantuvo la actitud y buenas formas, a pesar de que el novillo era muy complicado. Desde las banderillas se evidenció las pocas condiciones del toro, el cual sacó genio y peligro en la muleta. No se inmutó Álvaro y le plantó cara en una faena de cercanías, muy embraguetado y valiente, extrayéndole pases de buena calidad, sobreponiéndose a las condiciones del astado. Una pena el reiterado fallo a espadas, pues la meritoria labor de Samper era como para obtener el apéndice que le abriría la puerta grande. Hubiera sido un premio merecido, pero la cosa quedó en una calurosa ovación.

Cerraba cartel el madrileño Javier Cortés, quien llegaba a Quito después de ser el triunfador del “Ciclo de las 8 naciones” de Las Ventas. Con su primero, “Enamorado” de 453 kilos, casi nada que destacar. En mi opinión, equivocó la elección de los terrenos y los tiempos en los cites, a tal punto que resultó espectacularmente volteado, menos mal sin consecuencias graves. Silencio.

Con el que cerraba plaza, “Ropablanca” de 410 kilos, salió más dispuesto ante un novillo bastante incierto y violento en sus embestidas. Se arrimó con mucha verdad y además de las condiciones negativas del novillo tuvo que hacer frente a un molesto viento. Se lo paso muy cerca al de Mirafuente y su esfuerzo logro calar en los tendidos. Media estocada que no hizo ningún efecto y tres golpes de descabello redujeron cualquier posible premio al silencio de un público que prefirió buscar la salidas de la plaza con prontitud. En todo caso, la novillada dejó mejor sabor de boca. La Feria “va para arriba”.




La fiesta brava tiene futuro
Nota Toros Nuevo Progreso
El queretano Juan Pablo Llaguno destacó en el ruedo de la Nuevo Progreso. A. GARCÍA
Concluyen los festivales Taurinos
Los alumnos más destacados del país participaron en festejos realizados en la Plaza de Toros Nuevo Progreso


GUADALAJARA, JALISCO.- Con un gran objetivo se llevó a cabo el último de los dos festejos taurinos realizados en la plaza de toros Nuevo progreso de Guadalajara.

Los alumnos más destacados de las academias taurinas del país tuvieron la oportunidad de actuar en una plaza de primera, dejando a su paso sorprendentes resultados.

El día de ayer seis chavales de diferentes estados de la Republica conformaron el cartel de la última tarde de festejos taurinos de este año en la Nuevo Progreso, lidiando a la usanza portuguesa seis ejemplares donados por diferentes ganaderías, y mostrando a la vez sus ganas por ser alguien el argot taurino e irse abriendo puertas en su precoz afición a la fiesta brava.
Cada uno de ellos, a su estilo, mostró capacidades para ejecutar el toreo, destacando la actuación del queretano Juan Pablo Llaguno, cuyas cualidades quedaron plasmadas en el ruedo de la Nuevo Progreso, al enfrentarse a un eral de la ganadería de Jorge de Haro, dejando ver su técnica y sobre todo el entendimiento que tiene frente a la cara del toro.

El público le jaleó fuerte tandas por la diestra y al natural, ligando templados pases por ambas manos.
Y también actuó el tapatío Fernando Gómez Vega, alumno de la Academia Municipal Taurina de Guadalajara, que dirige el matador Manolo Arruza. Este chaval mostró cualidades, en series por la derecha, dejó notar sus recursos, ganándose el pareció de los aficonados, para poner así en alto el nombre de Jalisco, y en especial, el de la escuela taurina de nuestra ciudad.

Buena labor, buen fin. Ojalá siga habiendo esta clase de eventos, que impulsan el amor a la fiesta taurina, pero sobre todo, dan oportunidad a las chavales de medirse ante la cara de toro, siendo ésta, la única manera de ganar terreno y aprendizaje en la difícil profesión de torero.

Edgar A. Flores


Macías se lleva duelo ante Tomás

Nota Fotogaleria Toros Monumental Plaza México
El torero aguascalentense Arturo Macías demostró sus ganas de querer ser una figura del toreo. EFE
El torero mostró sus amplias cualidades y ganas de llegar a ser una gran figura
En medio de un magnífico ambiente taurino, José Tomás, máxima figura de la actualidad taurina mundial, y Macías brindaron una gran tarde de toros al público

MÉXICO, D.F.- El torero aguascalentense Arturo Macías demostró sus ganas de querer ser una figura del toreo, al llevarse el mano a mano con el español José Tomás en la Plaza México, tras cortar dos orejas por una de su alternante.

En lo que fue la cuarta corrida de la Temporada Grande 2009-10 en la casi repleta Plaza México, los dos destacados diestros lidiaron un encierro de la ganadería Xajay, el cual resultó de buena presencia aunque de juego bastante irregular.

En medio de un magnífico ambiente taurino, José Tomás, máxima figura de la actualidad taurina mundial, y Macías brindaron una gran tarde de toros al público, al mostrar un enorme profesionalismo y una entrega que fue premiada con los aplausos.

El "Príncipe de Galapagar' abrió la tarde con una faena variada, lucida y arriesgada, la cual tuvo una petición general, misma que no fue concedida por el juez de plaza, Miguel Angel Cardona pero sí premiada por el público con vuelta al ruedo.

Con su segundo toro, el madrileño volvió a entregarse por completo en su faena, la cual ahora sí remató bien con el acero para cortar una merecida oreja.

Con su tercero poco pudo hacer el español, por lo que regaló un séptimo astado con el que mostró mucho empeño valor y voluntad, para concluir con una gran ovación.

Macías logró una emotiva primera faena en la que mostró sus amplias cualidades y ganas de llegar a ser una gran figura, en faena que resultó muy aplaudida y premiada con las dos orejas.

Con su segundo, el aguascalentense no pudo igualar la labor anterior a pesar de su empeño y valor, por lo que terminó con aplausos.

Con su último fue atropellado materialmente por su rival, lo que le hizo disminuir su capacidad para concluir con merecidas ovaciones.


El impacto de Silveti y la maestría de El Juli
Nota Toros Ignacio Garibay
Torero mexicano Ignacio Garibay. NOTIMEX
La intensidad de Igancio Garibay tuvo lo suyo
Brillaba con luz propia el nombre de Diego Silveti, al lado de dos toreros de estilos muy contrastados, como El Juli e Ignacio Garibay

JURIQUILLA, QUINTANA ROO.- El ambientazo en la hermosa plaza de Provincia Juriquilla era de auténtico lujo, y no era para menos con un cartel de esta categoría donde brillaba con luz propia el nombre de Diego Silveti, al lado de dos toreros de estilos muy contrastados, como El Juli e Ignacio Garibay.

Las buenas vibras estaban a favor de Diego, la noche de su debut como novillero en suelo azteca, un hecho nostálgico que, seguramente a todos los que vieron torear a su padre, provocó algún recuerdo agradable de ese torero tan profundo y místico, que no se olvida.

Y tras romper el paseíllo, la figura noble, entrañable, de Juanito Silveti, fue otra clara evocación de la solera de esta dinastía, homenaje señero al torero que supo dar ese toque clásico a esta casa de toreros buenos.

La curiosidad era grande, y los sinodales muchos. Tanto en el callejón de la plaza como en los tendidos, había un sinnúmero de buenos profesionales con los ojos bien abiertos para ver al nuevo Silveti.

Y vaya sorpresa tan grata cuando jugó los brazos suavemente para torear a la verónica al novillo de Fernando de la Mora que abrió plaza, y también en el quite por tafalleras que calentó la noche.

Estoico, concentrado y sereno, Diego no se dejó impresionar por nadie y dejó un grato sabor de boca con un toreo vertical, sentido y sincero, que tuvo su clímax con unos muletazos en los que se cambió una y otra vez el engaño por la espalda hasta enloquecer al público de emoción.

A esta fase del trasteo había antecedido unos redondos con mucho temple, sentido de la colocación y el ritmo, aderezados con personales pases de pecho.

Todo estaba listo para que cosechara dos orejas de rigor cuando falló con la espada. Y no es que hiciera la suerte de matar con la desconfianza lógica de su padre (¡aquellas rodillas de cristal!), sino que se dejaba la mano de la espada un poco atrás y pinchazo en lo alto.

Después de esta primera impresión, en la que el público pudo constatar las cualidades de Diego Silveti, el hijo del Rey David dio una ovacionada vuelta al ruedo, en medio del cariño de un público que percibió, en este torero de nuevo cuño, un artista en ciernes.

Todavía sin el rodaje y los recursos suficientes –ésta es la quinta novillada de su vida– enfrentó al novillo corrido en sexto lugar, al que ejecutó un estrujante quite por tafalleras en las que manifestó que, por si fuera poco, también tiene raza y valor.

En su afán de triunfo –era importante es foto a hombros con El Juli–, regaló un sobrero de la misma vacada, un torete que tampoco correspondió al prestigio de su divisa, y con el que volvió a bosquejar inteligencia y trazo, sobre todo cuando toreó en redondo y entusiasmó a un público volcado con su personalidad, dotada de una diáfana sencillez y una forma de ser muy natural, así como su toreo.

Y si la frescura había permeado en todo cuanto realizó Diego, la cátedra de El Juli tuvo un auténtico realce, pues el madrileño demostró, una vez y mil veces más, porqué ocupa un sitio de tanta jerarquía en la baraja taurina mundial.

La reciedumbre y los arrestos delante del complicado segundo, se transformaron en exquisito pulso a la hora de torear al cuarto, un toro que, a fuer de llevarlo cosido a la tela, terminó embelesándolo en una faena de una técnica asombrosa y una suavidad de pasmo.

Las dosantinas y los redondos fueron el epicentro de una obra donde El Juli acarició las embestidas del toro de Santa Bárbara, al que enseñó el camino del temple e hizo ver mejor de lo que realmente era, ya que al principio punteaba al final del muletazo y no era fácil de templar.

La rotunda estocada que colocó el maestro madrileño fue la mejor rúbrica a una faena para toreros, que los había en el callejón, y de todos los pelos y condiciones. Ahí quedó eso.

En medio del alumbramiento que supuso la actuación de Diego y la perfección julista, la intensidad de Igancio Garibay tuvo lo suyo. Y es que al primer toro de su lote se lo zumbó desde al arriesgado quite donde utilizó, como recurso insual, arrojar una zapatilla (de charol) para obligarlo a arrancarse.

Esta pasaje y diversos detalles con la muleta, ya cuando se había rajado por completo del de Santa Bárbara, dejaron entrever el gran momento por el que atraviesa Ignacio, un torero que se mantiene fiel a sus principios.

El quinto, que era el toro más hecho, de una corrida bien presentada, no le regaló una sola embestida a Garibay, que le buscó las vueltas con decisión no obstante que se acostaba por el pitón derecho y no era tarea fácil ponerse delante.

Esta faena no tuvo el mismo calado en el público, que alentó su quehacer sólo en contados momentos, aunque Ignacio no lo tomó en cuenta y salió a tratar de hacerle faena con una actitud más que digna.

Al final de la larga función, el público salió complacido de una corrida que tuvo interés, y marca en el calendario una fecha de la que algún día no muy lejano podamos estar orgullosos como aficionados: la del debut en México de Diego Silveti, torero de dinastía.

Ficha

Plaza de toros "Provincia Juriquilla". Lleno en noche fresca. 4 toros de Santa Bárbara, bien presentados y variados de juego, de los que sobresalió el 4o. Y 3 novillos de Fernando de la Mora, de escaso juego. El Juli (nazareno y oro): Palmas y dos orejas. Ignacio Garibay (verde botyela y oro): Oreja y ovación. Diego Silveti (azul turquesa y oro): Vuelta, palmas y palmas en el de regalo. Destacó en banderillas Armando Ramírez, que saludó. Y en varas, Rodolfo Acosta.




Supera Macías a Tomás en su mano a mano
por: Agencia
Fuente: NOTIMEX
El mano a mano tan esperado en la semana tuvo un triunfador absoluto en la figura de Arturo Macias, que logró una victoria tan grande como el escenario en el que se dio, la Plaza México

CIUDAD DE MÉXICO, México.- El torero aguascalentense Arturo Macías demostró sus ganas de querer ser una figura del toreo, al llevarse el mano a mano con el español José Tomás en la Plaza México, tras cortar dos orejas por una de su alternante.

En lo que fue la cuarta corrida de la Temporada Grande 2009-10 en la casi repleta Plaza México, los dos destacados diestros lidiaron un encierro de la ganadería Xajay, el cual resultó de buena presencia aunque de juego bastante irregular.

En medio de un magnífico ambiente taurino, José Tomás, máxima figura de la actualidad taurina mundial, y Macías brindaron una gran tarde de toros al público, al mostrar un enorme profesionalismo y una entrega que fue premiada con los aplausos.

El ‘Príncipe de Galapagar' abrió la tarde con una faena variada, lucida y arriesgada, la cual tuvo una petición general, misma que no fue concedida por el juez de plaza, Miguel Angel Cardona pero sí premiada por el público con vuelta al ruedo.

Con su segundo toro, el madrileño volvió a entregarse por completo en su faena, la cual ahora sí remató bien con el acero para cortar una merecida oreja.

Con su tercero poco pudo hacer el español, por lo que regaló un séptimo astado con el que mostró mucho empeño valor y voluntad, para concluir con una gran ovación.

Macías logró una emotiva primera faena en la que mostró sus amplias cualidades y ganas de llegar a ser una gran figura, en faena que resultó muy aplaudida y premiada con las dos orejas.

Con su segundo, el aguascalentense no pudo igualar la labor anterior a pesar de su empeño y valor, por lo que terminó con aplausos.

Con su último fue atropellado materialmente por su rival, lo que le hizo disminuir su capacidad para concluir con merecidas ovaciones.

Nov., 29, 2009




30 de noviembre de 2009
Arturo Macías, inconmensurable
Pudo cortar rabo, mas la polémica se hizo presente

Horcio Soto Castro

Arturo Macías se consagró como una auténtica figura del toreo, a pesar de que fue atracado y le robaron descaradamente el rabo que se ganó con todas las de la ley y logró su sexta salida a hombros de la gran Plaza México, mientras que a estas horas le siguen lloviendo mentadas de madre al juez Miguel Ángel Cardona, quien reapareció en el biombo luego de que estuvo suspendido por un año por sus pésimas actuaciones.

Este mano a mano que sostuvieron el madrileño José Tomás y Arturo Macías de Aguascaliente, fue interesante de principio a fin y pudo ser mejor de no ser por los astados que no dieron el juego esperado. Pero sirvió para la consagración de Arturo Macías.

En este caso las orejas y el rabo vienen a ser retazos de toro, en comparación con el desempeño inconmensurable que tuvo el diestro aguascalentense que escuchó los gritos consagratorios de ¡torero..!, ¡torero..! y la entrega de ese gran público que aquilató en todo su valer la faena a su primero, Cuatro Caminos, por la que le dieron dos orejas que vienen a ser nada y lo mismo si le entregan el rabo, porque lo que hizo Arturo será histórica la faena, que no se borrará de las retinas de los cientos de aficionados que se congregaron en el coso capitalino, cuyos vítores traspasaron las fronteras, no sin antes detenerse en Aguascalientes y quedar plasmados en la tierra de la gente buena.

Arturo Macías, aparte de que hizo que explotara la Plaza México con erupciones de olés sostenidas, puso al público al borde de la locura por no manifestarse éste de una forma que sublimara la faena del diestro, que alcanzó a rebasar límites celestiales, pues fue una labor de diez estrellas.

Su faena no empezó en forma agradable, ya que al torear por chicuelinas se embarulló un tanto y el toro lo prendió feamente que se pensó que iba a quedar en "encerrona" de José Tomás.

Regresó al ruedo mostrando la casta a flor de piel y luego de la suerte de varas se echó gallardamente el capote a la espalda para cuajar tres gaoneras, además de ajustadas de gran estética sin mover los pies un milímetro.

De ahí arrancó para burilar una obra de arte que debe ser colgada en exhibición permanente en el museo de más arte que exista en el mundo. La faena no tuvo desperdicio y estuvo preñada de momentos brillantes de todo clase de trazos y color. Los cambios de mano que fueron sublimes, los ayudados en redondo que destilaban arte y temple. Las trincherillas y los pases cambiados por la espalda que fueron un muestrario artístico. Terminó realizando la dosantina y el de pecho, saliendo garboso para darle reposo a su amigo con una amplia sonrisa y explotó el cónclave con los gritos de ¡torero..!, ¡torero..! Y siguió... siguió... y siguió toreando bajo esa tónica de arte sin detenerse hasta rematar la faena y dejar que la gente siguiera con los gritos de torero.

Incontenible petición de los máximos trofeos par Arturo y el juez, desdeñosamente sacó dos pañuelos para las orejas y el público solicitó el rabo que estaba bien ganado. El juez puso oídos de mercader. Estuvo inamovible y el público se encrespó gritándole lindeza y media para él y sus familiares.

Macías dio la vuelta entre la locura devolviendo toda clase de prendas que tapizaron el ruedo de sombreros y una parte le aventaron toda una tintorería.

Arturo Macías se creció y mantuvo su casta y su forma de torear, con el valor que lo ha hecho famoso y ahora con el temple y arte que mostró. El toro manseó. El diestro estuvo tesonero y valiente sacando los muletazos por ambos lados y realizar la dosantina y toreo por la cara. Se fue a tablas y ahí le clavó la espada hasta la empuñadura.

Macías mantuvo su línea de valiente y encastado buscando consolidarse más de lo que ya estaba. Dejó que el sobresaliente Christian Ortega ejecutara un par de chicuelinas, mientras que Armando Ramírez "El Bamban" salía al tercio por sendos pares de banderillas.

En el centro del ruedo, rodillas en tierra. Arturo citó al astado que no acudió y fue acortando distancia y se desplazó en esa posición y ahí lo trincó feamente el toro y le bailó un zapateado. Nuevamente se pensó en que iba con la cornada, pero regresó para seguir toreando ya en condiciones en desventaja. Pinchazo, media y descabello.

JOSÉ TOMÁS

José Tomás como príncipe que es, salió vestido haciendo honor a ese título. El de Galapagar ha dejado constancia de su capacidad torera de figura, con su valor acerado, con conocimientos supremos, así como su temple y clase. Su presencia impone. Al inicio de su primero fue desarmado en un par de ocasiones y después se lució por verónicas y cuajó una faena variada en el centro del ruedo, a pesar de que perdía las manitas la res. Realizó una gran faena con tandas largas de naturales templados que le corearon sin cesar; cambios de mano matemáticos y afarolados. El toro se empezó a quedar corto, lo aguantó y le hizo caminar. Pero lo sometió y hasta ayudados en redondo le cuajó, molinetes, la vitamina. Hubo un momento que la gente estalló de gusto al ligar el de trinchera, ayudado, cambio de mano, el de pecho y molinete que pareció un solo muletazos de tan ligado que fue. Se fue por derecho, la espada quedó defectuosa y tardó en doblar la res. Fuerte petición de oreja que escamoteó el juez. José Tomás salió al tercio y no quería dar la vuelta, pero lo obligaron para un reconocimiento general.

A su segundo le hizo una gran faena a su estilo, valiente, variada y con momentos luminosos. José Tomas ya ha rebasado la maestría y saca los muletazos donde no los hay. La faena fue a más luego de someterlo con toda clase de pases y hasta le hizo el teléfono. Terminó con pases sueltos, pero de calidad y buen gusto y manoletinas ajustadas. Gran estocada para oreja y vuelta. Aplausos al toro.

El tercero manseó, buscaba las tablas y salía distraído. Y a pesar de ello le sacó la faena. Lo mató pegado de estocada trasera y al primer golpe.

Regaló un séptimo de la misma ganadería, muy pobre de cabeza y también con problemas, que José Tomás supo resolver con su sapiencia toreara. Estuvo empeñoso pero no dio para más. Estocada y tardó en doblar para que le soltaran un aviso.

EL ENCIERRO

La ganadería de Xajay envió un encierro parejo, fino, bien armado que acudieron a la caballería, sobresaliendo los corridos en segundo lugar al que el juez le pasó de noche para premiarlo con arrastre lento cuando menos. El primero que fue aplaudido. Los demás cumplieron decorosamente.

EL FESTEJO

Desde la víspera se agotó el numerado y ayer se vendió el resto para que la plaza registrara algo así como tres cuartos, la mejor entrada de la temporada y de algunas otras, con gran ambiente y ese olé sonoro al despeje de cuadrillas.


"Zotoluco" y Garibay, lo mejor de la tarde en Saltillo
El Juli, sólo destellos ante el peor lote

Miguel Ángel García

ENVIADO ESPECIAL

Saltillo, Coha.- Un espectacular lleno ha registrado la plaza de toros Fermín Espinosa "Armillita", con el cartel donde se anunció a Eulalio López "Zotoluco", Julián López e Ignacio Garibay. Desde hacía mucho tiempo, afirman los saltillenses, la afición taurina no vivía una tarde como la de ayer, lo cual se reflejó en los tendidos de la plaza con un lleno hasta las banderas.

En la arena se mostró un "Zotoluco" como siempre, en maestro y toda la tarde entregado, ofreciendo el pecho a sus enemigos y haciendo valer a pulso su condición de figura del toreo; ante su primer toro, un toro inválido, abrevió. Mientras que en su segundo realizó una faena de maestro con ambas manos y la concluyó, ahora sí, de una certera estocada. El público pidió las dos orejas y el juez se hizo del rogar, aunque finalmente las concedió.

También se dejó ver a un Ignacio Garibay en la cumbre de un toreo maduro y ese argumento fue el que patentó ante sus dos toros, a cuyos moritos nada fáciles, les hizo fiesta con capa y muleta, para al final llevarse una oreja de cada toro.

Y por último, Julián López, que ante el escaso juego de su lote, únicamente tuvo destellos sin llegar a más; en su primero se fue en blanco y en su segundo, por una soberbia estocada el juez le otorgó una oreja, sin embargo y a petición de un sector del público, la autoridad sacó rápidamente el otro pañuelo y le regaló una orejita más y que al final el torero hispano terminó arrojando a los tendidos. Suponemos que hasta a él se le hizo exagerado.

Caray, señor juez, si es que la faena del Juli valió dos orejas, supongo que la de "Zotoluco", de su segundo toro, valía las dos y el rabo. ¿O a poco fueron iguales?

NADA QUÉ SUBRAYAR DE BUENO

Se lidió un encierro de La Estancia, débiles y descastados; el primero y segundo, infumables. El tercero, se dejó meter mano; el cuarto y quinto, regulares y el sexto brusco, complicado.

DETALLES

Al final del paseíllo, el ganadero y empresario, ingeniero Armando Guadiana Tijerina, le hizo entrega de un zarape al matador Julián López y de una pintura al director de la banda de música de Zacatecas, Salvador García, por 50 años al frente de la orquesta.

LABOR MAESTRA

Decíamos que "Zotoluco" continúa con su paso de maestro consumado de la torería. En su segundo toro, el cual fue el mejor de su lote, Eulalio cuajó una faena basada en el entendimiento absoluto que tuvo ante su astado, que a decir verdad en manos menos experimentadas no hubiera valido nada. El diestro se jugó la vida de a deveras y logró tandas con ambas manos, bien templadas y con mucha hondura. Al final rubricó de una certera estocada y cortó dos orejas. En su primero, que solamente rodó y rodó en la arena, abrevió.

CALIDAD Y OFICIO

De lo malo que fue el encierro, Garibay se llevó el toro mejorcito, sin que éste fuese una maravilla. Fue el primero de su lote y ante este morito el torero salió por todas y con una actitud desbordante, entregada y que enloqueció a los tendidos. Nacho recibió su astado de una larga cambiada de hinojos, luego veroniqueó con calidad y quitó por chicuelinas. Con la muleta inició de rodillas su labor muleteril y ante el toro que fue soso, el espada ligó tandas con ambas manos y terminó haciendo fiesta con circurrets, trincherazos y desdenes. Lástima que al entrar a matar dejó media espada que no bastó, luego una entera y le fue entregada nada más una oreja.

Con su segundo toro, Nacho echó mano de su oficio ante un astado que era brusco en la embestida y complicado; el espada lo lidió valientemente y le peleó los muletazos hasta extraerle lo último que el astado tenía adentro. Y Nacho no se amilanó y también lo toreó de rodillas, lo que impactó por lo áspero del toro. Al final, pinchazo, estocada y petición de oreja que se concede.

EL JULI

Julián López, abrevió en su primero y en su segundo toro, el cual tenía muy poca tela de dónde echar mano, sobresalió la estocada que dejó y que pasaportó al toro sin puntilla. En este toro el juez le concedió exageradamente dos orejas.


Compeán y Temo, en la fiesta brava
Futbol y algo más

Justino Compeán y Cuauhtémoc Blanco, presidente de la FMF y seleccionado nacional, respectivamente, no sólo de futbol viven, sino también se dan su tiempo para asistir a la fiesta brava, ayer, en la Plaza México.









El natural, la suerte más bella del toreo
Jardinero de San Mateo


Suelen ser los "manos a mano" en el toreo, la capitalización de éxitos de dos figuras en una temporada que para rematarla, se les pone enfrente. Sin embargo, la empresa adelantó vísperas y formó el cartel con dos espadas notoriamente diferentes. La una, hierática, vertical y clásica de una angustiosa lentitud, mientras el diestro se mantiene embebido y sereno. La otra, joven, arrebatado pero con una muleta privilegiada que cuando el toro le embiste, noble y humillado, logra espléndidos pases, a más de que juega hermosamente con la capa. Salieron siete reses de Xajay, muy finos de lámina pero muy diferentes en su juego, entre ellos, superior, Cuatro Caminos, primero de Macías y Tú y las Nubes, primero de José Tomás. Ante una plaza llena en numerado, José Tomás vino a decir por qué es la figura prima de España. Ofreció ceñidos y enormes naturales donde se distinguían los tres tiempos. Mostró su majestad en algunos trincherazos y varios del desdén, aplaudidos fuertemente por los conocedores, mató tras un descabello, merecía la oreja y vino una sonora bronca. Respondió Macías con unas chicuelinas, citando desde muy lejos, mas se llevó un revolcón, puso pie y ofreció la más pura interpretación de la gaonera. Inició con un escalofriante péndulo y después tomó la sarga con la derecha, superándose cuando la tomó para naturales, honró las manoletinas y mató recibiendo ante el grito de ¡Torero!, y el juez, ahora benevolente que le dio dos orejas. Quizá era el mensaje, premiar lo que hacen los nuestros a fin de ponerlos en la difícil pelea con los peninsulares. Macías hizo gala de enorme casta, valor y arte en quizá los mejores muletazos que ha dado en la Plaza México. Volvió por sus fueros José Tomás, interpretando bellas y acadenciadas verónicas, siempre hacia delante y luego quitó por chicuelinas. Seguro del triunfo, brindó a todos e inició con excelentes estatuarios. El toro no humillaba lo suficiente y prefirió primero el toreo por alto y remató con el de pecho ante un público entusiasmado que clamó por segunda vez ¡Torero! Finalizó con unas manoletinas de excelente factura y al despachar con una estocada entera recibió una oreja. Luego la corrida se vino abajo. Los tres siguientes astados se rajaron y fueron solemnemente pitados. Macías inició su faena con el sexto, citando de rodillas en los medios y todavía dentro del platillo dio dos derechazos hasta que recibió un severo revolcón. Volvió por sus fueros, pero el toro era quedado y después de un pinchazo lo mató con media. Su asignatura está con esos toros, precisamente.

Volviendo al viejo rito mexicano del toro de regalo, el torero de Galapagar regaló a Babel de la misma sangre. Le dio hermosas chicuelinas andantes para llevarlo al caballo. Ante un manso, demostró que puede con todos los toros y en todos los terrenos. Interpretó una faena de riñones con la mano abajo y el toreo vertical, sonoramente aplaudida, matando de media, que sólo por la tardanza en la muerte no recibió premio. El público no se movía de los asientos. Esta es la evidencia de que no hay toro malo sino torero inexperto. José Tomás reveló su genio, Macías su coraje y llegamos así al fin de una memorable tarde. El arte y el valor en dos interpretaciones alegraron los sentidos y para la historia quedan las variadas chicuelinas y los naturales que allí se interpretaron. Y el domingo, ¡Es de Ronda y se llama Cayetano! Viva expresión artística de su abuelo.










JIA